El incremento en el precio del petróleo por la reducción en la plataforma de extracción de Arabia Saudita tendrá varios efectos en la economía del país, pues impactará en un mayor costo en las materias primas que utiliza la industria, pero también en las finanzas públicas del país al recibir más dólares por las exportaciones de crudo y a su vez erogar más recursos para comprar gasolinas, de acuerdo con el sector privado y analistas.

Francisco Cervantes Díaz, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), aseveró que el sector que encabeza se verá perjudicado por el encarecimiento de los insumos que utilizan, pero también se verán beneficiadas las finanzas públicas.

Explicó que entre más alto sea el precio de la mezcla mexicana, el impacto será más grande, aunque acotó que si la producción del país fuera mayor –dado que en este momento el promedio es 1.6 millones de barriles diarios– el beneficio se acentuaría.

Sobre una posible alza en las gasolinas y el diésel, combustibles que utiliza la industria, confió en que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador tenga un plan alterno, pues se comprometió a no encarecer los energéticos. Acotó que aún hay que esperar a saber cómo se manejarán las fórmulas con las que se calculan los precios de esos productos.

México recibirá más dólares por las exportaciones de crudo, pero tendrá que erogar más recursos para la compra de gasolina, cuyas importaciones representan 72 por ciento del total del combustible que se consume en el país, sostuvo Arturo Carranza, analista y consultor en temas energéticos.

Consideró que el incremento de casi 20 por ciento en los precios del crudo puede representar ingresos adicionales por 8 mil millones de pesos mensuales. Pero en contraparte, se gastarán 4 mil millones de pesos extras por la importación de gasolinas.

Sin embargo, México tendrá un ingreso neto de 4 mil millones adicionales por la baja en la plataforma de producción de Arabia Saudita, la cual, estimó, será transitoria y de corta duración.

Detalló que el efecto positivo viene de las exportaciones de petróleo, donde México vende un millón 139 mil barriles diarios en promedio y por esto recibe ingresos que se van al gasto púbico.

En contraste, el efecto negativo viene por el lado de las importaciones de gasolina, pues si se encarece el petróleo, se incrementan el precio de ese energético y aumenta el importe en el que el gobierno las adquiere en los mercados internacionales.

Intercam expuso que esta situación impactará sobre las utilidades de las aerolíneas, dado que la turbosina, combustible usado por las aeronaves, se elevará más de lo previsto. Alejandro González, analista de la casa de bolsa, explicó que un mayor costo por el energético provoca gastos operativos adicionales a las firmas aéreas, por lo que los resultados financieros, en especial las ganancias trimestrales, pueden tener un menor crecimiento en comparación al año previo.

Precisó que algunas compañías aéreas mexicanas cuentan con reservas de capital para mitigar este tipo de situaciones, por lo que los resultados financieros correspondientes al tercer trimestre del año –próximo a concluir– no tendrían resultados sorpresivos, aunque hay que esperar los números al cierre del año.