El gobierno debe resolver la contradicción entre la reforma constitucional al artículo tercero en materia educativa, porque implicó el compromiso del Estado por aportar más recursos al ámbito de la instrucción superior y su propuesta de gasto, pues reduce .6 por ciento el presupuesto total, expuso Tonatiuh Bravo ex rector de la Universidad de Guadalajara (U de G) y coordinador de Movimiento Ciudadano en San Lázaro.

Para el jalisciense el gasto mínimo a las universidades públicas deberá crecer 3 por ciento. Hay una abierta contradicción porque en la reforma constitucional lo que se hizo fue incluir nuevas responsabilidades, nuevos derechos y nuevas obligaciones para el ámbito público que tiene que ver con la educación inicial. El crecimiento del presupuesto, ahora es un decrecimiento de las universidades públicas estatales que está en la iniciativa de menos .6 por ciento, y con ese presupuesto no puede atenderse lo que se reformó en la Constitución.

De subsistir un problema como este las universidades públicas entraran aún en más problemas de solvencia, porque con este presupuesto ni siquiera se garantiza el incremento salarial que deben otorgar, ya que está por debajo de la inflación anual. Es evidente que a lo que va es a un recorte de todas las funciones sustantivas, y afectará la calidad y el gasto operativo, alertó.

Al cuestionarle cuál sería el costo social de mantenerse una restricción presupuestal adujo: Existe una contradicción con lo que planteaba como metas del gobierno para los jóvenes; los esfuerzos que se están realizando para incluirlos a ellos en el futuro productivo, pero hay que reconocer que algunas universidades, no todas, incurrieron en errores y problemas. Unos por no administrar correctamente su patrimonio y estar al borde de la quiebra, y otras por haber incurrido en acciones de carácter ilegal. Pero eso no tienen por qué pagarlo los jóvenes, no tiene por qué pagarlo el proyecto nacional educativo.

Peligra una función esencial para los jóvenes

–Cada año, desde hace décadas, se observa el mismo jaloneo presupuestal –se le recordó.

–Es una actitud contradictoria, porque finalmente se pone en la incertidumbre, en la zozobra, a instituciones que durante muchos años han cumplido una función esencial para los jóvenes, nos parece que no debería ser ésta la tónica, ni la lógica aplicada, y por eso invitamos al gobierno a que en el periodo que vamos a discutir ingresos y presupuesto se puedan subsanar todos estos problemas.