El proceso para designar al nuevo presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para el periodo 2019-2024, que conducirá el Senado de la República, corre riesgo de viciarse, pues el proyecto inédito de convocatoria para ese mecanismo –que introduce que los perfiles de los aspirantes se valoren a partir de un conjunto de indicadores de idoneidad y probidad– puede no ser avalado por la Junta de Coordinación Política (Jucopo).

Alertaron lo anterior expertos y organizaciones que han seguido de cerca el inicio del proceso, apenas unos días después de que reconocieron el trabajo de las Comisiones Unidas de Justicia y Derechos Humanos del Senado para emitir el diseño de la convocatoria. Esto debido a que el senador Cruz Pérez Cuéllar (Morena) dirigió un oficio a los presidentes de ambas comisiones, Julio Menchaca y Kenia López, respectivamente, expresando su deseo de rectificar el sentido de su voto.

El legislador apoyó que la convocatoria sea vinculante para que los aspirantes al cargo deban cumplir una serie de indicadores de idoneidad y probidad durante el proceso, a fin de ser elegidos para la terna en que se definirá a quien ocupe la presidencia de la CNDH para el siguiente lustro.

Sin embargo, en su oficio, Pérez Cuéllar señala que al momento de sufragar levantó la mano erróneamente cuando se votaba en favor del proyecto, cuando él deseaba hacerlo en contra.

No es posible rectificar voto

Entrevistada por La Jornada respecto a esta situación, Itzel Checa Gutiérrez, coordinadora del Observatorio de Designaciones Públicas, expresó que la rectificación del voto del senador no es posible, de acuerdo con el artículo 189 del reglamento de ese recinto legislativo.

Aunque, alertó, de alguna manera genera hermetismo, pues toca a la Jucopo decidir qué procede con el proyecto que aprobaron las comisiones unidas, lo que tiene que hacer a más tardar el 4 de octubre. Esperamos no se echen atrás y se respete el documento aprobado, que dará transparencia y progresividad a la designación.