Alegatos de oreja propician corrupción
Lunes 14 de octubre de 2019, p. 17
La iniciativa de prohibir los alegatos de oreja
en todos los tribunales del país provoca dudas en la mayoría de los abogados consultados, quienes aunque aceptan que la propuesta sería congruente con el sistema de justicia acusatorio, también advierten que esa opción alargará más los procesos judiciales, al añadirles una nueva etapa.
Los alegatos de oreja
son las audiencias que jueces, magistrados e incluso ministros conceden por separado a alguna de las partes de un juicio con el fin de oír sus argumentos. Se llaman así porque en estos encuentros los juzgadores suelen limitarse a escuchar a los abogados, sin intervenir; es decir, sin hacer preguntas.
Una iniciativa de reformas a la Ley de Amparo y a la Orgánica del Poder Judicial de la Federación, promovida por el senador Ricardo Monreal, propone prohibirlos argumentando que son contrarios a los principios de publicidad, contradicción, inmediación e igualdad procesal del sistema de justicia acusatorio. Esto es, que al darse en privado y sin conocimiento de la otra parte involucrada en el juicio, provocan desi-gualdad en el proceso y propician prácticas como el influyentismo y corrupción, se lee en la iniciativa del parlamentario.
Los litigantes consultados relataron que esos alegatos son práctica común entre los jueces de primera instancia, mientras en los tribunales el contacto personal con magistrados sólo se da cuando existe alguna cercanía o amistad con el juzgador.
Abogados que litigan en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) confirmaron que este recurso existe hasta con algunos ministros, quienes suelen recibir previa cita a fiscales, consejeros jurídicos o directores legales de todos los órdenes de gobierno y dependencias federales, así como a defensores particulares.
En estas reuniones, los ministros suelen escuchar los comentarios de los abogados, sin comentar absolutamente nada de sus argumentos; esto sucede sólo durante la fase de instrucción de un expediente.
Al respecto, el abogado Roberto Mayorga Armisén señaló que la iniciativa de prohibir estas entrevistas es buena, pero añadió que la práctica de los alegatos de oreja no se erradicará del todo, dada la carga de trabajo y los nexos ya existentes entre los operadores jurídicos, litigantes y jueces
.
La iniciativa de Monreal propone suplir los alegatos de oreja
por una audiencia que sería pública y con la intervención de ambas partes del juicio.
Los abogados consultados pidieron que, en todo caso, antes de tomar cualquier decisión sobre el tema, se consulte con el gremio, así como con los integrantes del Poder Judicial de la Federación.