Jueves 24 de octubre de 2019, p. 32
El depósito de 8 mil 600 toneladas de basura en rellenos sanitarios del estado de México y Morelos está garantizado, pero se trabaja en diversas acciones para reducir esa cantidad, que significa una erogación anual de 2 mil 800 millones de pesos, como destinarla a generar energía o la posibilidad de revivir el proyecto de termovalorización, pero sin que le cueste un peso al gobierno
.
Tras la firma de un acuerdo de colaboración para el manejo y disposición de residuos con autoridades mexiquenses, la secretaria de Medio Ambiente, Marina Robles, dijo que la termovalorización ha evolucionado en las formas y en las tecnologías que utiliza para su uso.
La idea es que no le cueste a la ciudad, o le cueste muy poco, el procesamiento con esas nuevas tecnologías, y no haya que pagar 30 años volúmenes que dejan a la ciudad muy comprometida financieramente
, y llegar a 2020 con un manejo de sólo 2 mil toneladas, señaló.
Hoy, destacó, la ciudad dispone de un volumen importante de residuos para el procesamiento y uso como energético por parte de Cemex, pero se analizan otras tecnologías que operan en el mundo, a fin de emitir en breve una convocatoria para usarlas.
Se trata de establecer las condiciones que la ciudad requiere en el aprovechamiento sustentable de los residuos, someter a un comité científico la valoración de los distintos proyectos, y convocar a la opinión pública para explicarle estas posibilidades, indicó.
El secretario de Obras y Servicios, Jesús Esteva, informó que diariamente se generan 12 mil 700 toneladas de residuos sólidos, de los cuales 8 mil terminan en rellenos sanitarios del estado de México y 600 en los de Morelos, contando para ello con dos estaciones de transferencia.
Comentó que la compactación como combustible para la industria cementera, a la que se envían 800 toneladas, y el procesamiento de subproductos, ha reducido en 700 toneladas la captación de residuos, y se estima que próximamente sean mil toneladas más, con la introducción de diversas tecnologías y el envío de los residuos de la construcción para estabilizar el suelo del parque Cuitláhuac.