Washington. Los Astros de Houston respiran. Sacaron un importante triunfo por 4-1 sobre Nacionales de Washington para dejar la Serie Mundial 2-1 a favor de los anfitriones.

El abridor Zack Greinke sorteó demasiados aprietos mientras el veterano Michael Brantley y el venezolano Robinson Chirinos soltaron el bate para que los Astros consiguieran la victoria que necesitaban, la cual se llevó el relevista Josh James, ya que el iniciador, pese a su desempeño, no terminó cinco entradas. Por los locales, Aníbal Sánchez no estuvo fino y cargó con el revés al permitir 10 hits y cuatro carreras en cuatro y un tercio de episodios.

El mexicano Roberto Osuna cerró el partido con tres ponchados: Trea Turner, Adam Eaton y Juan Soto, que ayer cumplió 21 años y lo festejó en el Nationals Park pero no pudo hacer nada que asombrara.

Fue el primer partido de una Serie Mundial en Washington desde 1933, con los Senadores.

Houston consiguió sus dos carreras en la segunda y tercera entrada con un par de impulsadas para las anotaciones de Carlos Correa y José Altuve.

Altuve bateó dos dobles y anotó en ambas oportunidades. Los Astros confirmaron que no bajaron los brazos después de lucir timoratos en su casa al achicar su déficit en la serie al mejor de siete, ahora 2-1.

La ofensiva de casa respondió en el siguiente rollo para romper el cero con la carrera de Ryan Zimmerman; sin embargo no aprovecharon el momento y la novena visitante incrementó la diferencia en la quinta y sexta entrada, aunque fue en esta última que se dio el bambinazo del venezolano Robinson David Chirinos por el jardín izquierdo (4-1).

El cuarto juego de esta serie al mejor de siete encuentros será hoy con Patrick Corbin en la lomita por los Nacionales, mientras que los Astros avanzaron y posiblemente abran con el mexicano José Urquidy.

Antes del partido, las Grandes Ligas otorgó el premio Roberto Clemente al lanzador de Indios de Cleveland, Carlos Carrasco.