Sarahí, integrante del Grupo Especial de Reacción e Intervención (GERI), dejó los operativos contra el narcomenudeo y se dedicó a atender visitantes nacionales y extranjeros en el Zócalo, quienes hicieron fila para vestir un chaleco antibalas, colocarse un casco y subirse a un vehículo de la Policía de Investigación (PDI).

Es el módulo que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) instaló para el primer encuentro por la transparencia y la protección de datos personales, uno de los 90 que hubo en la plaza, pero el de ellos despertó la curiosidad de niños, mujeres y hombres, quienes coincidían en la pregunta ¿cuánto pesa?, en referencia al chaleco.

Con el apelativo Amazona, ella y sus nueve compañeros de la PDI adscritos al GERI mostraron el lado amable de un efectivo del grupo de élite de la PGJ y explicaban el uso del equipo táctico, permitieron que lo tocaran y vistieran, además de autorizar la foto.

Al ser entrevistada, la princesa guerrera dijo sentir satisfacción de que los visitantes ubiquen a la corporación –creada en 1986– y que los felicitaran por arriesgar la vida en cada acción.

Todos los días arriesgamos la vida, siempre, desde que sabes que vas a un inmueble porque no sabes qué vas a encontrar detrás de una puerta, no sabes si estará esperando una persona armada, tres o 10 en la entrada o en cualquier piso.

La recién premiada por su trabajo destacado de un grupo de 250 agentes de la PDI, recordó que son los vecinos de los lugares recuperados o familiares de víctimas de secuestro quienes nos agradecen, nos dan agua, hasta nos llegan a dar tortas, sándwich y tú te sientes bien”.

En el encuentro participaron 90 sujetos obligados cuyo personal se desplegó en 160 módulos para realizar distintas actividades didácticas, los más concurridos fueron los de asesoría laboral, salud, vivienda, juegos de lotería con las estaciones del Metro o programas sociales, así como los de lectura de la Constitución en capítulos como derechos de los indígenas.