En América Latina (AL) cada año mueren 50 mil personas víctimas del Sida, pese a que en su mayoría son casos prevenibles, pues se trata de pacientes que llegan a atención médica en fases muy avanzadas de la enfermedad, afirmó Miriam Ruiz Mendoza, directora general de Prevención y Pruebas Rápidas en América Latina y el Caribe de la AIDS Healthcare Foundation (AHF), una de las organizaciones más importantes en la prevención, detección y tratamiento de este mal.

En el contexto del Día Mundial de la Lucha contra el Sida, que se conmemora cada primero de diciembre, destacó que hoy sabemos que una persona que está en tratamiento tiene carga viral indetectable, por lo que puede vivir muchos años, e incluso, alcanzar un estado intransmisible de este padecimiento.

Respecto al incremento de contagios en adolescentes y jóvenes en México, señaló que no sólo hay una grave crisis de educación sexual, tampoco hay un acceso adecuado a métodos anticonceptivos, y en particular de condones.

Indicó que AHF solicitó en 2018 información sobre cuántos condones había comprado el gobierno, y el resultado fue de un condón al año por persona. Si no tenemos condones y no hay un acceso real de los y las jóvenes, no vamos a poder parar las transmisiones de VIH; de enfermedades de transmisión sexual ni de embarazos adolescentes.

Desde hace más de 20 años, agregó, hay una discusión para dar acceso real a jóvenes a los condones, lo que no sólo implica adquirir y distribuir a las clínicas y unidades de salud. Deben estar disponibles en escuelas y espacios donde acuden los jóvenes, pues el objetivo es garantizar un acceso sin discriminación ni cuestionamientos.

Reunidos en la Alameda Central, donde mediante el humor, comediantes convocaron a los asistentes a informarse sobre qué es el VIH/Sida y la necesidad de promover el autocuidado en las prácticas sexuales, Ruiz Mendoza enfatizó que ningún país del mundo logrará las metas 90-90-90 establecidas por ONU-Sida para que 90 por ciento de las personas que viven con el virus conozcan su condición; 90 por ciento tenga acceso al tratamiento; y 90 por ciento garantice su apego al mismo y alcancen la condición de carga viral indetectable.

Ruiz Mendoza alertó que tampoco se están haciendo los esfuerzos suficientes para abatir la discriminación y el estigma que padecen quienes viven con VIH. Muchos diagnósticos tardíos se siguen relacionando con la discriminación, en particular, en poblaciones clave como la de hombres que tienen sexo con otros hombres y en mujeres transgénero.