Digitalizar los trámites más comunes ha sido la apuesta de la Secretaría de Movilidad (Semovi) para abatir la corrupción que imperaba en el control de millones de vehículos que circulan en la Ciudad de México, principalmente en la expedición de placas, tarjetas de circulación y cambio de propietario, afirmó Andrés Lajous Loaeza, titular de la dependencia.

La gestión de todos estos trámites era prácticamente una ficción, porque sólo para taxis había una sola ventanilla para tramitar 141 mil concesiones. En realidad el trámite se hacía en el papel, ese era el trabajo de los gestores: conseguir que el papel se moviera de un lado a otro, pero no realizaba de forma sustantiva la revisión documental, es decir, corroborar que los taxis realmente tuvieran sus documentos en orden. Y todavía peor, no se hacía la revisión física-mecánica que ahora se hace en los verificentros.

Lo mismo ocurría en el caso de la revista de ruta para las 16 mil unidades de transporte concesionado, entre autobuses y microbuses que existen en la ciudad y que también debían realizarse con papeleo en una sola ventanilla, dijo en entrevista.

En la Semovi se realizan más de un millón de trámites al año, los más comunes son los de control vehicular, es decir, alta y baja de placas y cambio de propietario, que representan como 50 por ciento de todos los trámites, el resto son licencias y renovación de la tarjeta de circulación para autos particulares, revista de ruta y carga, y licencia de conducir tipo B para taxi.

A partir del segundo semestre de este año la dependencia avanzó en la digitalización de todos estos servicios. Sólo para el caso de la licencia tipo B suman ya 8 mil expedidas mediante trámites realizados en línea, mientras las revistas realizadas hasta el momento suman 56 mil, 10 mil más de todas las que se realizaron en 2018.

Tras los cambios en la dinámica para realizar estos trámites, el proceso consiste en subir o entregar los documentos a la autoridad, lo que tarda alrededor de 10 minutos, que implica tomar la foto a cada documento, y una vez que se suben, pueden pasar entre uno y seis días para validar que esos documentos son legales.

Posteriormente, se envía a los solicitantes un documento electrónico diciendo que ya están listos y ya no tienen que asistir a ningún lugar y simplemente por correo se les notifica que son válidos sus documentos.