Jueves 5 de diciembre de 2019, p. 4
Guadalajara, Jal., La reivindicación feminista reinó en la presentación del libro Recuerdos del futuro (Seix Barral/Grupo Planeta, 2019), de la estadunidense Siri Hustvedt, quien, acompañada de la mexicana Elena Poniatowska, rio junto con cientos de asistentes –la mayoría mujeres– después de contar cómo se defendió de un acto de violencia sexual.
‘‘Un hombre hace muchos años me tocó mis partes íntimas; yo no podía primero dar crédito a lo que pasó y después sentí una enorme rabia, así que le solté un codazo en el vientre con tal fuerza, que lo sofoqué. Sentí enorme satisfacción al ver lo que hice”, relató Hustvedt, premio Princesa de Asturias de las Letras 2019.
Poniatowska aludió a la dificultad de ser mujer ante el acoso y sostuvo que en México hay mexicanas que no pueden o no se atreven a denunciar, pues en el proceso reciben burlas ‘‘hasta del sicólogo que las atiende”.
En ese acto en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, Hustvedt fue consultada sobre la pertinencia de que las mujeres se defiendan unas a otras en una sociedad polarizada, en lugar de buscar la unidad de los sexos bajo el término simple de seres humanos.
‘‘Entre más nos defendemos, más seres humanos nos volvemos. Eso es lo que creo que es ser humano en una sociedad normal”, respondió.
Poniatowska, a su vez, le recordó a la estadunidense que ella sostuvo que con los movimientos de reivindicación por los derechos de las mujeres se han ido redescubriendo filósofas feministas del siglo XVII.
‘‘En México el primer discurso público feminista lo pronunció en el Museo de Antropología e Historia Rosario Castellanos ante el entonces presidente Luis Echeverría -quien sigue vivo-. Era totalmente inequitativa la situación de hombres y mujeres en México entonces”, dijo la escritora mexicana.