Alejandro Díaz de León Carrillo, gobernador del Banco de México (BdeM), advirtió que los riesgos cibernéticos se han colocado dentro de los desafíos más relevantes que enfrenta el sector financiero por su potencial impacto sistémico y velocidad de contagio.

Detalló que la investigación sobre el hackeo que afectó las operaciones bancarias en agosto pasado encontró incumplimientos de Prosa, que reportó fallas que impidieron a los usuarios de tarjetas de crédito y débito hacer uso de éstas para hacer transacciones, por lo que sí habrá sanción.

Al presentar el Reporte de estabilidad financiera correspondiente a diciembre de este año, reconoció que durante 2019 se intensificó la cantidad de incidentes de seguridad de la información reportados por las instituciones financieras a las autoridades.

En este entorno, las autoridades financieras en México, dijo, han continuado avanzando en los tres ejes de estrategia que se desarrolló para la mitigación de los riesgos cibernéticos.

Al menos 90 por ciento de las instituciones bancarias ha designado formalmente a un oficial en jefe de seguridad de la información , quien será el responsable ante las autoridades como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y el Banco de México de diseñar estrategias institucionales de reforzamiento de la seguridad y de responder a incidentes.

Adelantó que antes de concluir el año se formalizará el convenio de interconexión que refuerza los requerimientos de seguridad para operar con el BdeM.

Reveló que se firmaron acuerdos con el Grupo de Respuesta a Incidentes Sensibles de Seguridad de la Información. Además, las instituciones financieras han establecido mecanismos para reportar a las autoridades.

Por otro lado, el gobernador del banco central explicó que los bancos en México cuentan con los recursos económicos necesarios para enfrentar escenarios complicados y así responder con solvencia y liquidez financiera.

Destacó que los riesgos que enfrentan las instituciones financieras se encuentran limitados por un crecimiento responsable.

Díaz de León Carrillo agregó que los hogares mexicanos cuentan con diferencial positivo entre el ahorro y el endeudamiento. El crecimiento en el financiamiento al consumo es menor y no presenta ningún riesgo de incumplimiento de los usuarios de los servicios financieros, porque se encuentra basado en el crecimiento del salario y las remesas.