No se presentó a firmar para seguir proceso en libertad
Viernes 6 de diciembre de 2019, p. 39
El ex esposo de Abril Cecilia Pérez Sagaón no se presentó a firmar el beneficio legal para seguir en libertad el proceso judicial en su contra por los delitos de violencia familiar y lesiones, por lo que al vencer el plazo la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México solicitará a un juez de control que revoque las medidas cautelares, lo que implica que se emita una orden de aprehensión en su contra.
La procuradora Ernestina Godoy informó que ayer venció el término legal para que Juan Carlos García Sánchez acudiera a firmar a las oficinas de Medidas Cautelares del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México y justificara por qué no se había presentado.
Adicionalmente, Godoy explicó que la PGJ está a la espera de que un juez de control realice la audiencia para determinar si reclasifica los delitos de violencia familiar y lesiones al de feminicidio, con lo que de concretarse el ex esposo de la mujer perdería automáticamente el beneficio de las medidas cautelares que le permiten estar fuera de prisión.
Las oficinas de Medidas Cautelares del TSJ, ubicadas en Doctor Claudio Bernard número 60, cerraron en punto de las 18 horas sin que acudiera el acusado, mientras fuentes ministeriales revelaron que se prevé que la audiencia donde se definirá la reclasificación del delito se realice este viernes en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte.
En tanto, dos mujeres fueron ejecutadas en hechos distintos en calles de las colonias Gabriel Ramos Millán, en Iztacalco, y Nueva Santa María, en Azcapotzalco, por sujetos desconocidos, quienes en ambos casos iban en motocicleta, sin que se conocieran más detalles.
Asimismo, la Secretaría de Seguridad Ciudadana reportó que una mujer de 48 años que caminaba sobre calzada de Tlalpan, en la colonia Portales Oriente, al parecer fue obligada por un sujeto a subir a su vehículo en el que ingresó a un hotel, donde sufrió abuso sexual.
El presunto responsable salió del lugar con la ropa de la mujer, quien posteriormente llamó a sus hijos para ser auxiliada, mientras el recepcionista llamó a elementos policiacos.