La aprobación para reducir el número de jugadores foráneos permitidos en cada club que anunció la semana pasada la Federación Mexicana de Futbol (FMF) dará buenos resultados si los equipos realmente le dan oportunidad a los canteranos, pues de nada servirá si ocupan las plazas que quedarán vacantes con elementos de experiencia, aseguró el visor de talentos Ángel Coca González.

Luego de la asamblea de dueños efectuada el pasado 3 de diciembre, se acordó que la cifra de elementos foráneos permitidos en cada escuadra disminuiría paulatinamente de 12 a nueve, a partir de la temporada 2020-2021 y hasta la 2022-2023.

Actualmente, cada club en cada partido puede convocar a 12 extranjeros, pero sólo nueve pueden entrar a la cancha. Tras dicha reunión, los dueños decidieron que para el ciclo 2020-2021 se reducirá a 11 citados y seguirán nueve con opción a jugar. En 2021-22: serán diez y ocho podrán tener actividad. Mientras en 2022-23: serán nueve y siete con oportunidad de alinear. Ello, tras la petición del técnico nacional Gerardo Martino de aminorar la cantidad extranjeros en el balompié tricolor.

Aunque González aplaudió dicha medida, advirtió que sólo funcionará si se apoya a los jugadores jóvenes, pues afirmó que México es potencia a nivel infantil y juvenil, hay muchísimo talento en esas categorías y eso hay que aprovecharlo al máximo.

El descubridor de futbolistas como Cuauhtémoc Blanco e Hirving Lozano consideró que además de la reducción del número de foráneos, “la federación debería obligar a los clubes a tener una estructura perfectamente bien definida en sus fuerzas básicas, con trabajo técnico, táctico, físico y estratégico, con visorías permanentes, no cada seis meses.

A las categorías menores sólo les ponen atención cuando vienen torneos importantes, la mayoría de los equipos forma a sus planteles de la noche a la mañana, pero si los forzaran a tener una planeación en forma, habría una mayor producción de jugadores,.

Subrayó que el compadrazgo es otro factor que impide el desarrollo de los futbolistas jóvenes, toda vez que “hay muchísimos niños que se quedan en la orilla porque no son apoyados, tienen un buen nivel pero hay bastantes compromisos a nivel directivo que los dejan relegados.

En muchos clubes no hay una persona o un comité encargado de las fuerzas básicas, y le dejan esa responsabilidad al técnico del primer equipo, y desgraciadamente, éste tiene compromisos con amigos, familiares, representantes y hasta con los propios directivos, y tiene que darles prioridad a quienes son recomendados.

Asimismo, Coca González, quien actualmente se desempeña en el club América, opinó que para formar buenos jugadores, con bases sólidas, los clubes también deben brindar apoyo sicológico a sus canteranos, esto, con la finalidad de que no pierdan el piso cuando son campeones a corta edad.

Recordó lo que ha sucedido con diversas generaciones de la selección nacional Sub-17, que fue campeona del mundo en dos ocasiones (Perú 2005 y México 2011) y subcampeona en Emiratos Árabes Unidos 2013 y Brasil 2019, cuyos integrantes no han logrado trascender a escala internacional, salvo algunas excepciones, como Carlos Vela y Giovani dos Santos.

¿Dónde están esos campeones? ¿Cuántos chicos de la Sub-17 se han perdido porque no están preparados para la fama? ¡Casi todos! La mayoría no continúa con los procesos adecuados, sostuvo.