El prelado incumplió promesas a víctimas
Ignoró contenido de carta del Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis de Monterrey sobre el sacerdote
Viernes 20 de diciembre de 2019, p. 14
Antes de que los Legionarios de Cristo difundieran su informe sobre las denuncias de abusos sexuales cometidos por el sacerdote Fernando Martínez –el 22 de noviembre pasado–, el Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis de Monterrey envió una carta al prelado Eloy Bedia, involucrado en los casos, para reiterarle las acusaciones contra él por encubrir los delitos y subrayar el desinterés que ha mostrado ante ello.
A pesar de esto, la congregación decidió no aceptar la responsabilidad del cura en su informe. En la misiva fechada el 5 de noviembre de 2019, de la cual La Jornada tiene copia, el promotor de justicia Pedro Pablo González, expone que las víctimas solicitaron la intervención del arzobispo de Monterrey y presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Rogelio Cabrera López, por los abusos cometidos por Martínez en el Instituto Cumbres de Cancún, ocurridos en los años 90, y la manipulación de su conciencia sufrida por su intervención
en favor del agresor.
En el texto se reprocha la manera en que Bedia trató lo sucedido con falsas promesas de atender integralmente los casos, brindar acompañamiento a las víctimas y sus familias, así como de retirar del ministerio activo al sacerdote y ofrecer tratamiento espiritual y humano. En cambio, señala, Martínez fue asignado a otro cargo y se presume que los abusos pudieron repetirse.
También, se expone el desinterés por parte de Eloy Bedia por el bien de los afectados y que nadie se interesó por encontrarlos, hasta que las víctimas se acercaron. Estas actitudes, añade, hacen verlo como un encubridor
del agresor y perpetuador del ambiente de abusos promovido por el fundador de los Legionarios
, Marcial Maciel.
Además, resalta que el director general de Legionarios de Cristo, Eduardo Robles Gil, quien negó el acceso a los archivos de la congregación, ha querido excusar a Bedia bajo el argumento de que obedecía a Maciel.
En este sentido, González le recomendó al prelado Bedia renunciar a participar en el capítulo general, organismo de gobierno de ese grupo católico.
Al respecto, el ex sacerdote Alberto Athié, afirmó que lo sucedido con Martínez es un caso emblemático
que refleja que el problema de Maciel no terminó con su muerte, se continúa en sus discípulos de varias formas
.
Una de ellas, señaló, es que el fundador de la Legión abusó de varios integrantes y algunos de ellos siguieron la línea de las agresiones contra otros niños o niñas en el ejercicio de su ministerio
, como sucedió con Martínez, y la otra es el encubrir los casos.