Líbano. El destituido presidente de Nissan, Carlos Ghosn, huyó de Japón a Líbano y argumentó que lo hizo para escapar del fraudulento sistema de justicia de Japón, en un hecho que generó cuestionamientos sobre cómo logró salir del país uno de los ejecutivos más reconocidos del mundo. Ghosn fue arrestado en noviembre de 2018, acusado de diversos delitos financieros, después fue puesto en libertad y luego arrestado de nuevo. Antes de su huída, se encontraba en libertad condicional con el pago de una fianza equivalente a 14 millones de dólares, mientras esperaba un juicio previsto para abril. Líbano no tiene ningún acuerdo de extradición con Japón. Se ha conjeturado que un gobierno extranjero, el japonés, o ambos, podrían haber participado en el escape, o simplemente se hicieron de la vista gorda para librarse de un juicio potencialmente embarazoso.