Barcelona. El socialista Pedro Sánchez, presidente del gobierno en funciones desde hace 10 meses, regresó ayer a la política española luego de que el partido independentista Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) aseguró que lo apoyará para conformar un gobierno de coalición. La decisión llegó tras alcanzarse la creación de una mesa de negociaciones para buscar resolver el conflicto político en Cataluña.

El Consell Nacional de ERC, reunido en esta ciudad, decidió con 96.5 por ciento de 203 votos de su padrón que los 13 diputados de la formación se abstengan en la investidura del candidato Pedro Sánchez en los próximos días, informó Pere Aragonés, vicepresidente de Cataluña y coordinador de la agrupación.

Esta abstención permitiría al líder socialista obtener la confianza de la cámara baja en una segunda votación el martes de la siguiente semana; 48 horas antes Sánchez perderá una primera votación al no contar con una mayoría de 176 de los 350 diputados, en la sesión plenaria de investidura.

A cambio de su abstención, ERC indicó en un comunicado que obtuvo del Partido Socialista Obrero Español, de Sánchez, la instalación de una mesa de negociación entre gobiernos (el central y el regional catalán) y una futura consulta en Cataluña sobre los acuerdos que se alcancen.

La mesa se instalará 15 días después de la formación del nuevo Ejecutivo español, se hará con respeto a los instrumentos y a los principios que rigen el ordenamiento jurídico democrático, incluida la Constitución, buscará desbloquear y encauzar el conflicto político sobre el futuro de Cataluña.

El acuerdo llegó tras semanas de arduas negociaciones para diluir las inconformidades de ERC, luego de que su líder, Oriol Junqueras, y otros ocho independentistas fueron condenados en octubre pasado por el Tribunal Supremo Español a prisión por su papel en el fallido intento de secesión de Cataluña, hecho en 2017.

En este contexto, las autoridades belgas suspendieron la orden dearresto contra los líderes separatistas Carles Puigdemont y Toni Comin, exiliados en Bruselas, por participar en el intento fallido de secesión de Cataluña de 2017 al tener inmunidad como legislador en el Parlamento Europeo.