Concordia, Sin., Familias desplazadas por la violencia del municipio de Concordia marcharon para exigir al gobernador priísta Quirino Ordaz Coppel y al alcalde Felipe Garzón López que asignen terrenos para construir sus viviendas.

Acompañados por la diputada federal Olegaria Carrasco y por la local Alma Rosa Garzón , ambas del partido Morena, entregaron al edil priísta un documento para solicitarle que gestione la entrega de un terreno de tres hectáreas a fin de cubrir las necesidades de 137 familias que han huido de sus comunidades ubicadas en la zona serrana del municipio.

En el oficio también piden una hectárea para familias provenientes de varios municipios de Durango, las cuales han emigrado por falta de trabajo y por la violencia.

Garzón López firmó el documento de recibido; no obstante, aclaró que son los legisladores quienes tienen que aprobar los recursos para que se puedan atender las demandas de los desplazados. Encaró a los inconformes, a quienes dijo: Están manchando mi imagen como presidente, pues siempre los he apoyado.

En respuesta, algunos le gritaron y lo conminaron a que atienda la solicitud de vivienda, pues las familias de desplazados que radican en colonias de ese municipio necesitan un hogar y por temor no pueden regresar a sus hogares, donde dejaron todas sus pertenencias.

La legisladora Olegaria Carrasco manifestó que estará al pendiente de que se atienda la solicitud de los desplazados, pues no es fácil para las personas abandonar su pueblo, quedarse sin nada, empezar de cero y no tener empleo.

Dijo que es necesario que se proporcione información sobre cómo se distribuirán los recursos que se han aprobado para las viviendas de los desplazados. El año pasado el Congreso autorizó 30 millones de pesos y a las familias que residen en Mazatlán aún no se les han asignado predios.

En tanto, la diputada local Ana Rosa Garzón, también presidenta de la comisión de seguridad del Congreso estatal, indicó que estará al tanto de la atención que la Secretaría de Desarrollo Social de Sinaloa dé a los desplazados –aún no se ha elaborado un censo– y de la forma en que la dependencia está entregando los recursos.