Jefes de Kansas City y Titanes de Tennessee, por la Conferencia Americana, y los 49ers de San Francisco contra Empacadores de Green Bay en la Nacional, serán los dos partidos hoy para alquilar balcones por los boletos al Supertazón 54 en Miami, el 2 de febrero.

La AFC enfrentará el mejor ataque de la NFL contra una de las mejores defensas, si confiamos en lo que las dos franquicias han demostrado en los playoffs.

Si se esperaba la presencia de Kansas City en esta fase, la de Te-nnessee no lo era tanto ya que para llegar hasta aquí tuvieron que eliminar sorpresivamente en la lucha por un comodín a los Patriotas de Nueva Inglaterra de Tom Brady. Posteriormente, también sorprendieron en la serie divisional a los Cuervos de Baltimore, 28-12.

Es cierto que los Titanes vencieron a los Jefes en noviembre (35-32), pero estos son los playoffs y los Jefes vienen de una increíble victoria la semana pasada cuando remontaron un marcador adverso de 24-0 para imponerse finalmente 51-31 a los Texanos de Houston de la mano de su mariscal estelar Patrick Mahomes.

Fue un gran partido, una gran batalla. Son robustos en defensa, sus apoyadores son físicos, es un grupo realmente bueno en todas las áreas, dijo Derrick Henry, hombre fuerte de los Titanes.

Henry domina en gran medida la clasificación del mayor número de carreras con 377 yardas cubiertas en postemporada. Algo para impresionar al entrenador de los Jefes, Andy Reid, quien anhela su primer anillo. Tiene una visión excelente, es rápido, es alto y fuerte. Es un gran jugador.

Pero Kansas City también tiene su arma letal con Mahomes, cuyos cinco pases de anotación contribuyeron al fantástico regreso exitoso contra Houston. Prueba de una mentalidad de acero que los Jefes todavía tendrán que mostrar este fin de semana, si quieren renovar una tercera vez en el Supertazón, de la cual perdieron la primera edición en 1967 contra Green Bay, pero ganaron la cuarta a expensas de Minnesota en 1970.

Para Tennessee, la única gran final se remonta al 2000, cuando cedieron ante los Carneros de San Luis.

A diferencia del oponente que los desafiaría en la final, San Francisco y Green Bay están históricamente acostumbrados a los juegos de enero y febrero.

La franquicia de California tiene cinco títulos (1982, 1985, 1989, 1990, 1995) con una derrota en la final en 2013, ante Baltimore. La de Wisconsin no está lejos con cuatro coronaciones (1967, 1968, 1997, 2011) y un fracaso (1998), contra Denver.

Como era de esperar en la segunda ronda, los 49ers triunfaron (27-10) sobre los Vikingos y los Empacadores con su mariscal Aaron Rodgers eliminaron a Seattle (28-23).

Si confiamos en su confrontación en la temporada regular, San Francisco tiene una ventaja sicológica gracias a la gran victoria lograda en casa (37-8) en noviembre.

Contra Rodgers, que sueña agregar un segundo anillo a su récord, se encuentra la formidable defensa de los 49ers.

(Con información de Afp)