El gobierno de Nuevo León, que encabeza Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, violó un amparo provisional que la justicia federal concedió a los campesinos de tres ejidos de los municipios de Linares, China y Montemorelos para detener temporalmente la construcción de la presa Libertad, dieron a conocer en entrevista Mariano Núñez González y Raúl Rubio Cano, abogado y ecologista, respectivamente, quienes asesoran a los afectados por el embalse.

El 13 de enero, en un acto de la paraestatal Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey (SADM), Rodríguez Calderón anunció que se repararán dos caminos por donde ingresarán maquinaria pesada y materiales a la zona del proyecto hidráulico, entre las cabeceras municipales de Montemorelos y Linares, por donde cruza el río Potosí.

Mariano Núñez aseguró que estos trabajos no cumplen los 60 requisitos contenidos en el manifiesto de impacto ambiental aprobado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Las obras en los dos caminos de terracería, los cuales miden 44 kilómetros, costarán 131 millones de pesos.

La presa Libertad, aseguró El Bronco, garantizará durante apenas una década el abasto de agua potable en 16 municipios conurbados a Monterrey y en otros ocho del resto de la entidad.

Se respetarán los derechos de propietarios: El Bronco

Ante la oposición al embalse por parte de campesinos de San Jacinto, San Pedro de los Escobedo, La Barreta y anexos, en los municipios de Linares y China (porque la presa inundará sus tierras o hará que deje de correr agua por el río Potosí, que ellos usan para sus cultivos y ganado), el mandatario anunció que su gobierno respetará los derechos de “todos los poseedores de propiedades ejidales y particulares en la zona.

Todo tiene que hacerse como establece la ley. Tienen mi palabra. Ya hablé con el presidente (Andrés Manuel López Obrador) para que agilice en el Registro Agrario Nacional sus derechos, para que todo mundo tenga esa posibilidad y entre en la negociación con Agua y Drenaje, que tendrá que pagar a valor comercial lo que cuesta la tierra, señaló.

Agregó que para quienes decidan su reubicación, el estado construirá un fraccionamiento con todos los servicios, para que vivan chingonamente, no jodidamente, y aseguró que una vez terminada la rehabilitación de los caminos, para finales de marzo o principios de abril de este año, se iniciará la construcción de la cortina de la presa.

La inversión total estimada para la presa Libertad es de 5 mil 129 millones de pesos. El gobierno de Nuevo León la considera el proyecto principal del Plan Hídrico 2030, que sustituye a Monterrey VI, planteado por la pasada administración estatal (el gobierno del priísta Rodrigo Medina), a un costo de hasta 62 mil millones de pesos, y que comprometía las finanzas estatales por 27 años.

Para este año se invertirán en la construcción de la presa Libertad mil 928 millones de pesos, una mitad proveniente de recursos federales y la otra del erario estatal.