La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tiene en sus manos la oportunidad histórica de resolver positivamente el caso de la desaparición forzada de los luchadores sociales Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya –desaparecidos en Oaxaca en mayo de 2007– y fijar criterios jurisprudenciales novedosos para analizar estos casos, señalaron familiares de las víctimas y organizaciones sociales.

En conferencia de prensa, recordaron que el pasado 12 de diciembre de 2019 el segundo tribunal colegiado en materia penal del primer circuito solicitó a la SCJN que atraiga el caso, tomando en cuenta su importancia, por lo que el máximo tribunal del país tendría que asumir el análisis de este tema, si así lo decide.

De igual forma, señalaron que el 6 de mayo de 2019 –casi seis años después de haberse iniciado el juicio sobre este episodio de desaparición forzada–, el juzgado cuarto de distrito de amparo en materia penal en la Ciudad de México concedió un amparo a los familiares de Reyes y Cruz, en el que ordenaba a la Fiscalía General de la República (FGR) seguir investigando el caso, crear una comisión especial de búsqueda –con capacidad de entrar en cuarteles militares– y citar a todos los posibles involucrados, entre otros puntos.

Sin embargo, como señal de nula voluntad política, la FGR y el Ejército se inconformaron con dicha resolución, por lo que será en las próximas semanas cuando se sabrá si la SCJN asume o no el análisis del tema, lo que garantizaría los derechos de acceso a la justicia, a conocer la verdad y a una reparación integral del daño en favor de las víctimas de desaparición forzada, sus familiares y de la sociedad.