Ginebra. La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró ayer emergencia internacional ante el brote del nuevo coronavirus 2019-nCov, y se opuso a cualquier restricción de viajes hacia o desde China, donde surgió la neumonía viral que ya provocó la muerte de 213 personas, unas 9 mil 700 contagiadas y más de cien mil bajo observación médica, sólo en el país asiático. La epidemia se ha propagado en al menos 18 países.

Nuestra mayor preocupación es la posibilidad de que el virus se propague a países con sistemas de salud más frágiles. No significa desconfianza con China, dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus, secretario general de la OMS, en conferencia de prensa en esta ciudad.

Tras reunirse con el comité de emergencia de la agencia de la Organización de las Naciones Unidas –que recomendó, casi por unanimidad, la declaratoria–, Ghebreyesus destacó que se debe apoyar a los Estados con menos recursos, porque “no sabemos qué tipo de daño puede causar el virus si se extendiera en un país con un sistema sanitario débil.

Podríamos haber visto muchos más casos (de contagios) e incluso fallecidos si no fuera por los esfuerzos de China con el fin de contener la enfermedad con estrictas medidas sanitarias, como el aislamiento total de varias ciudades, la construcción de dos hospitales para atender a pacientes y la participación del ejército, entre otras.

Señaló que el virus es un patógeno anteriormente desconocido que ha escalado a un brote sin precedente, y subrayó que la OMS no recomienda y, de hecho, se opone a cualquier restricción de viajes o comercio desde o hacia el gigante asiático.

La OMS define una emergencia de salud pública de alcance internacional como un evento extraordinario que constituye un riesgo para otros países y requiere una respuesta global coordinada.

La declaratoria, que se ha aplicado por zika, ébola, influenza porcina y polio, genera recomendaciones mundiales con la finalidad de prevenir o reducir la propagación transfronteriza de enfermedades, así como procedimientos de prevención, cuarentena, tratamiento y concienciación sobre la epidemia.

Además, el organismo se centra en la aceleración del desarrollo de una vacuna, terapias, diagnósticos y la lucha contra la desinformación –en la que ya lo apoya Twitter– o remedios alternativos.

La OMS quedó en el centro de la controversia debido a que el pasado día 23 no aplicó la declaratoria al considerar que era muy pronto para hacerlo y no había ninguna prueba de contagio entre humanos fuera de China y sólo era una urgencia local para la nación asiática.

Para esa fecha sólo se tenían registrados 25 muertos y 830 contagios confirmados en China, mientras en siete países se habían registrado una decena de casos.

Las autoridades chinas informaron a la OMS por primera vez de las personas infectadas con el nuevo coronavirus a finales de diciembre pasado, cuyo origen es la ciudad central de Wuhan, perteneciente a la provincia de Hubei.

La Comisión Nacional de Salud de China (CNS) informó ayer, en el reporte más reciente, que en ese país han fallecido 213 personas: 204 en la provincia de Hubei, centro del brote, con un récord de 43 decesos entre antier y ayer, y 9 mil 692 afectados.

Precisó que 157 personas permanecen gravemente enfermas y 47 han sido dadas de alta este jueves tras haberse recuperado.

La cifra total de personas que permanecen graves es de mil 527, 171 dadas de alta y 15 mil 238 sospechosas.

Un total de 113 mil 579 personas han tenido contacto directo con infectados, de las cuales fueron descartados 4 mil 201 casos y dados de alta, mientras 102 mil 427 están bajo observación médica, indicó la CNS de China.

El nuevo balance sugiere que el registro diario de decesos crece de forma marcada, a pesar de las medidas sanitarias sin precedente adoptadas en toda la región de Hubei hace una semana.

Paralelamente, la OMS confirmó que hay 98 casos en 18 países de Asia, Oceanía, América del Norte y Europa, pero ninguna persona ha muerto. Antier estimó que la tasa de mortalidad global del nuevo virus es de 2 por ciento, pero señaló que la cifra es preliminar.

Los síntomas de este virus son similares al resfriado y la influenza; provoca tos, fiebre, dificultades para respirar y puede derivar en neumonía, síndrome respiratorio agudo severo, insuficiencia renal e incluso la muerte.

De acuerdo con especialistas, el número de casos confirmados se multiplicó por 10 en una semana y se espera que el pico de decesos aumente este fin de semana.

El número de pacientes contagiados por el virus en China continental está muy por encima de las 5 mil 327 personas infectadas en 2002 y 2003 por el síndrome respiratorio agudo severo (SARS). Hace casi 20 años ese coronavirus dejó 774 muertos en el mundo, 349 en China.

El Consejo de Supervisión de Preparación Global, organismo internacional de vigilancia, advirtió que muchos países no están listos para lidiar con la epidemia.

El gobierno de China ordenó a agricultores y mataderos aumentar su producción, mientras el brote de coronavirus interrumpe las redes de distribución de alimentos y los precios de las hortalizas están al alza. El gobierno tiene plena confianza en que triunfará en la lucha contra la epidemia provocada por el 2019n-Cov y en su capacidad para lograrlo, dijo una portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Detectan en EU primer contagio entre personas

Autoridades de salud en Estados Unidos reportaron el primer caso conocido en el país de transmisión de persona a persona por el virus. El paciente está casado con una mujer en Chicago que se enfermó tras regresar de un viaje a Wuhan.

La Casa Blanca informó en un comunicado que se han estado reuniendo a diario desde el lunes y el presidente Donald Trump les solicitó que encabecen la respuesta del gobierno de Estados Unidos ante el coronavirus. Su gobierno emitió una alerta nivel 4, el más alto, con la recomendación a sus ciudadanos de no viajar a China; esta semana ya había instado a los ciudadanos a no viajar al país asiático.

Rusia anunció el cierre de su frontera de 4 mil 250 kilómetros con China, sumándose a Corea del Norte y Mongolia.

Un crucero italiano con 7 mil personas a bordo quedó en cuarentena en el puerto de Civitavecchia, cerca de Roma, por casos sospechosos de coronavirus. Las pruebas preliminares a una pasajera china descartaron la presencia de la infección.

Estados Unidos y Japón fueron los primeros países en evacuar el miércoles a una parte de sus ciudadanos. En la madrugada del viernes un avión francés despegó de Wuhan con unos 200 pasajeros.

Las personas evacuadas permanecerán aisladas 14 días en un centro de vacaciones especialmente preparado en el sur de Francia, próximo a Marsella, para la realización de exámenes.

Otros países tienen previstos dispositivos parecidos: Italia anunció el envío de un avión, España dijo que la evacuación se realizaría en las próximas horas y Berlín prevé el traslado de unos 90 alemanes en los próximos días. Canadá también fletará un avión.