No hay justicia, asegura madre de una víctima
Lunes 3 de febrero de 2020, p. 23
Nezahualcóyotl, Méx., Cuando a Lidia Florencio le preguntan si está bien, ella responde que sí, aunque en el fondo vive atormentada por el asesinato de su hija Diana Velázquez. Todos los días amanece abrumada ante la falta de respuesta a sus preguntas: ¿Quién la mató, por qué?, y si algún día su familia tendrá justicia.
Ella compartió ayer su sentir tras la presentación del corto documental Que se quede conmigo tu esencia, realizado por estudiantes de la carrera de comunicación de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Xochimilco, quienes documentaron el racismo presente en las historias de feminicidio en el estado de México.
La proyección estuvo a punto de cancelarse, pues la víspera fueron hurtadas bocinas, consola y proyector de la sede del acto, el café El Coyote Combativo. No obstante, la presentación se logró con la presencia de familiares de Diana Velázquez Florencio y de las integrantes de los colectivos Vivas Nos Queremos Neza y Vivas en la Memoria.
Al final de la proyección el público participó en el acto. Un asistente preguntó a Lidia cómo vive tras el feminicidio de Diana, perpetrado en 2017. Ella respondió que Laura, hermana menor de Diana, aún sufre ataques de ansiedad, no quiere salir a la calle y cuando lo hace, intenta estar lo menos posible fuera del hogar.
Jairo Velázquez aún reprime el sentimiento de impotencia por el homicidio de su hija mayor.
Cuando me preguntan cómo me encuentro les digo que estoy bien, mi familia también responde lo mismo; pero todos los días cargamos con el dolor
, narró Lidia. Mi esposo se reprime, sé que está mal evadir el pesar, pero duele demasiado aceptar la realidad de que ella ya no está con nosotros
, dijo entre sollozos.
Acusan indolencia de la Fiscalía mexiquense
Lidia Florencio, de igual manera aseguró que a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (Fgjem) no le interesa esclarecer el feminicidio de su hija, dado que lo único que ha hecho en dos años y siete meses del crimen es emitir una ficha de recompensa de 300 mil pesos a quien dé información para esclarecer los hechos. Agregó que la Fgjem asignó un agente investigador que no tiene patrulla ni arma de cargo (se la robaron) y tampoco cuenta con recursos para hacer su labor.
No es casualidad que no se investigue
Michelle del Cueto, Elisa Martínez y Gisell Santos, estudiantes de Comunicación en la UAM-Xochimilco explicaron que la finalidad del corto fue evidenciar el racismo que viven los habitantes de la periferia de la Ciudad de México.
Las universitarias, quienes documentaron los testimonios de otras víctimas de feminicidio, encontraron en su investigación que “no es casualidad que las autoridades no investiguen.
El racismo traspasa el color de piel y se sitúa en el espacio
pues los responsables de investigar y sancionar revictimizan a las familias sólo por el hecho de vivir en pobreza urbana.