Definida como desafiante y estimulante, la nueva gira de Roger Waters, This Is Not A Drill, propició llamados de boicot de una organización judía, a la que se sumó el Beisbol de las Grandes Ligas (MLB por sus siglas en inglés) que, anunció– omitirá publicidad en su plataformas relacionada con las presentaciones del músico británico.

El pasado viernes, el Centro Simon Wiesenthal, organización que salvaguarda la memoria del holocausto, lanzó una agresiva campaña contra el concierto que Waters ofrecerá el 7 de octubre en el Palacio de los Deportes, al sostener que difunde un mensaje violento y racista contra la comunidad judía.

En tanto, la promotora Ocesa retomó una declaración del músico en torno al espectáculo: será un nuevo, sin restricciones. Mi trabajo es pensar ¿cómo puedo hacer que el rocanrol sea más interesante o teatral o emocionante o visual o musical o lo que sea? Los pasados 50 años lo que he hecho es expresarme.

No obstante, la organización dirigió cartas a las empresas que organizan y auspician el concierto instándolas a retirar sus patrocinios al concierto del cerebro creativo de la mítica banda Pink Floyd.

El prestigio de su empresa no debe ser manchado por aquellos que usan la música como camuflaje para discriminar y difundir un mensaje violento y racista, expresó el Centro Simon Wiesenthal en una carta pública.

Cabe recordar que Waters utilizó un cerdo inflable con una estrella de David para mancillar a los judíos que lo consideran un animal impuro, sostuvo el centro durante los conciertos del artista en 2018 en la Ciudad de México.

La organización judía B’nai B’rith International envió, en enero pasado, una carta al comisionado de la NBA, Rob Manfred, en la que censuró la participación de este deporte en la venta de boletos para la gira de Waters.

Charles O. Kaufman, presidente de esa organización, y su director ejecutivo Daniel S. Mariaschin dijeron que los puntos de vista de Waters sobre los judíos e Israel rebasan por mucho los límites del discurso civil.

Waters ha manifestado su apoyo al movimiento que propugna un boicot, desinversión y sanciones conocido como BDS que se presenta como una campaña no violenta a favor de los derechos de los palestinos y no respalda una solución específica al conflicto con Israel.