La cinta conectó con el mundo por la profundidad de sus mensajes; muestra la brecha entre ricos y pobres, sostiene crítico
Martes 11 de febrero de 2020, p. 8
Seúl. Los surcoreanos reaccionaron este lunes con sorpresa y alegría por la victoria en los premios Óscar de Parásitos, de Bong Joon-ho, que es la primera cinta de habla no inglesa, en 92 años, en llevarse el máximo galardón de Hollywood.
Aunque la industria cinematográfica de Corea del Sur es una de las más grandes del mundo, el éxito internacional de esta película no tiene precedente. Se trata de los primeros premios de la academia estadunidense para ese país.
Tras el anuncio en enero de las candidaturas al Óscar, el realizador dijo que lo veía como una señal de que el lenguaje ya no es un obstáculo para el éxito mundial. Corea del Sur lidia con la división entre los que nacieron con cuchara de plata
, en referencia a familias acomodadas, y quienes llegan con cucharas de tierra
, familias de bajos ingresos que no tienen esperanzas de movilidad social.
El triunfo en los Óscares es realmente inédito
, aseguró Jason Bechervaise, profesor de la Universidad Soongsil Cyber de Corea.
Agregó que Joon-ho ha logrado una hazaña que ningún otro cineasta había conseguido con una película que no está en inglés y ganar el premio más prestigioso de la industria
.
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, expresó estar muy feliz por el reconocimiento internacional al cine de su país. Extiendo mi agradecimiento en especial por dar sentido a la valentía y al orgullo de su pueblo. Estoy muy orgulloso del director Bong Joon-ho y del reparto
.
Parásitos ganó cuatro premios: mejor película, mejor director, mejor cinta internacional y mejor guion original.
Las redes sociales bullían de celebraciones el lunes. Me caen las lágrimas
, escribió un surcoreano en Twitter. Estoy orgulloso de Bong Joon-ho. Es increíble escuchar discursos de aceptación en coreano
. Otro internauta se preguntaba si habría que crear un día festivo para conmemorar la victoria.
El embajador de Estados Unidos en Corea del Sur, Harry Harris, publicó un tuit de felicitaciones con una foto de lo que parece ser japaguri, un plato de fideos que aparece en la película.
Me sentí tan orgulloso como coreano de escuchar que una película de mi país derrotó a tantas cintas extranjeras famosas
, aseguró Chung Su-yoon, residente de Seúl que vio el filme sólo dos horas antes de los Óscares.
El crítico de cultura pop Kim Hern-sik afirmó que la profundidad de los mensajes de Parásitos le permitieron conectar con personas del mundo.
Se entendió globalmente al mostrar el problema de la brecha entre ricos y pobres
, agregó refiriéndose a la popular banda de K-pop.
Una vez comparado por Quentin Tarantino con Steven Spielberg en su mejor momento
, Joon-ho perteneció a una de las primeras oleadas de cineastas surcoreanos en florecer después de la democratización del país a finales de los años 80, que abrió la puerta a un renacimiento cultural.
Su Memories of Murder, de 2003, que trata de asesinatos en serie de la vida real que sacudieron al país en los años 80, fue vista como una metáfora de una sociedad represiva producto del gobierno militar.
Le siguió el rotundo éxito de taquilla de 2006, El huésped, en el que retrata a un gobierno incompetente que se ve indefenso tras un desastre. En 2014, se trazaron paralelismos entre este filme y el hundimiento del ferry de Seúl en el que murieron 300 personas, en su mayoría escolares.
En El expreso del miedo (2013) describió un futuro distópico en el que los últimos humanos en la Tierra, supervivientes a un intento fallido de detener el calentamiento global, viajan sin parar en un tren separado según la clase, y las revueltas que estallan en los vagones de la clase baja.
Tilda Swinton, quien actuó en esa película, también protagonizó su aventura de ciencia ficción Okja (2017), producida por Netflix, sobre una chica de campo que intenta salvar a una bestia genéticamente modificada de una codiciosa empresa multinacional. La cinta suscitó importantes debates sobre la cría industrial y la explotación animal.
Trayectoria de 20 años
Joon-ho no es un cineasta que ha salido de la nada. Ha sido un director asentado durante casi 20 años y ha hecho películas excepcionales
, declaró Bechervaise.
También es encantador y sociable. Creo que esto ha sido un factor que influyó en lo lejos que ha llegado la película después de haber realizado cientos de entrevistas, posiblemente más, y de mezclarse con los votantes y la élite de Hollywood.
Joon-ho nació en Seúl en una familia vinculada al arte. Su abuelo materno fue un novelista de renombre, mientras su padre, ya fallecido, y todos sus hermanos son profesores universitarios en campos como la moda y las bellas artes. Estudió sociología en la Universidad Yonsei.
Según informaciones de prensa, participó en protestas callejeras como estudiante de Yonsei durante el movimiento prodemocrático del país en los años 80, y una vez le contó a un entrevistador que había sido arrestado por usar bombas molotov.
A lo largo de su carrera, a menudo ha abordado temas oscuros y difíciles, incluidos el crimen violento, la opresión sistemática y la crisis climática.
También ha hablado sobre cómo tuvo que lidiar con la ansiedad aguda debido a la fama, en un país donde la salud mental ha sido durante mucho tiempo un tema tabú.
Todas sus películas son una suerte de sociología en movimiento, y todas sus películas tienen un subtexto político
, destacó Michael Hurt, sociólogo de la Universidad de Seúl.
Todas están profundamente inoculadas con el pensamiento político y socialmente crítico, sin ser predicadoras ni obvias al respecto. Pocos directores pueden hacer esto.
La transmisión de la edición 92 de los Óscares tuvo el menor número de público de su historia, con sólo 23.6 millones de espectadores en Estados Unidos, según la cadena ABC. En 2019 fueron 29.6 millones de personas y en 2018, 26.5 millones.