Jueves 13 de febrero de 2020, p. 8
Una madre emprende una travesía en busca de su hijo que desapareció en su camino al migrar de forma indocumentada a Estados Unidos.
Su recorrido es a través de pueblos y paisajes desolados del México actual. Sin embargo, no todo está perdido para ella. En su odisea, conoce a un hombre recién deportado del país del norte. Ambos resisten a la soledad; se acompañan; una buscando a su hijo, y el otro esperando ver a su progenitora de nuevo.
Lo anterior no es parte de una nota periodística. Se trata de la historia de Sin señas particulares, película que ayer fue registrada en estas páginas debido a su participación en el pasado festival de cine de Sundance y de la cual se informó que competiría en la próxima edición del encuentro fílmico de San Sebastián.
Sin señas particulares ya participó en Donostia, en el norte de España, encuentro en el que ganó el premio Cine en Construcción, programa cuyo objetivo es apoyar a las producciones latinoamericanas. No obstante, el filme no tiene asegurada su participación en la próxima edición del certamen, según aclaró ayer Astrid Rondero, productora de la cinta.
Aclaró que la cinta obtuvo ese apoyo, pero no por ello se exhibirá allá.
Sin señas particulares es una película con esencia femenina, al margen de la historia sobre una mujer mexicana. La directora y escritora es Fernanda Valadez, egresada del Centro de Capacitación Cinematográfica, y la fotógrafa es Claudia Becerril, también de esa escuela.
Contaron con la experiencia actoral de Mercedes Hernández, egresada del Foro Teatro Contemporáneo, que dirigió Ludwik Margules. Hace teatro, cine y cuentería. Ha recibido en dos ocasiones –2005 y 2010–, beca que otorga el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) a la creación artística en narración oral. Y ha sido jurado de las becas del Fonca. Ha mostrado sus espectáculos en varios países de Sudamérica y Europa.
En la nota de ayer su nombre apareció como Magdalena Hernández, cuando debió decir Mercedes, a quien ofrecemos nuestras profundas disculpas. Magdalena es el personaje que encarna en el filme.
