Miércoles 18 de marzo de 2020, p. 27
El banco Credit Suisse revisó su pronóstico de crecimiento de la economía mexicana de 0.7 a una contracción de 4 por ciento, mientras la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) prevé que la actividad industrial descienda hasta 3.5 por ciento, pues el Covid-19 podría acentuar la recesión que enfrenta.
En un reporte enviado a sus clientes, modificó el pronóstico anterior, al citar la caída en la producción industrial, pero también el sector servicios y los precios del crudo. La institución estimó que el producto interno bruto (PIB) descenderá entre 1.9 y 3.6 por ciento en los dos primeros trimestres de este año.
Explicó que a las disrupciones económicas y la baja disponibilidad de insumos que empezaron desde febrero, ahora se suman la cuarentena por el coronavirus, así como una baja en el consumo y en la confianza empresarial.
Señaló que anticipa medidas fiscales como una baja en la tasa de interés del Banco de México, que en la actualidad se sitúa en 7 por ciento, aun cuando el peso ha tenido bajas récord.
Credit Suisse no fue el único, pues la directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, Gabriela Siller, estimó que la contracción del PIB será de 3 por ciento, dadas la medidas que se han tomado tanto en Europa como en Estados Unidos, en un intento por frenar la expansión de la pandemia de Covid-19. De igual forma, anticipó una afectación del sector servicios y en menor medida la actividad industrial.
El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas recortó su pronóstico de crecimiento a 0.6 por ciento de un previo de 0.9 por ciento. El presidente del Comité de Estudios Económicos, Gabriel Casillas, advirtió que en un escenario más pesimista el PIB se contraerá en 3.5 por ciento. Concamin estimó que la industria puede terminar el año con caída de 3.5 por ciento, cifra que duplicaría el resultado de 2019. Agregó que se puede evitar con un gran acuerdo nacional que incluya medidas de política fiscal, monetaria y regulación, entre otros.
Explicó que el cierre parcial o total de regiones manufactureras en China impactó a las cadenas globales de valor de las que México forma parte, por lo que la falta de insumos ha afectado a los sectores automotriz, equipo y maquinaria eléctrica, equipo electrónico y sus componentes, equipo de cómputo y sus componentes, industria textil y del vestido, productos químicos, farmacéutica, productos metálicos, y maquinaria y equipo.
Indicó que los efectos del coronavirus pueden profundizar la crisis del sector, el cual lleva 16 meses en recesión e incluso agravaría la situación de la industria alimentaria, de la construcción, textil, del vestido, calzado, acero y farmaceútico.
Señaló que el acuerdo nacional debe incluir la reducción del impuesto sobre la nómina, la deducibilidad al cien por ciento de las prestaciones laborales y finalizar cualquier medida unilateral de presión fiscal. Consideró que es necesario garantizar la liquidez de la economía y reducción de las tasas de interés, y aumentar el financiamiento de la banca de desarrollo a sectores estratégicos.
Añadió que urge un programa de inversión en construcción y otro energético, con al menos 50 por ciento de contenido nacional.