En México no es necesaria la aplicación masiva de pruebas de detección del Covid-19, porque se cuenta con un sistema eficiente de detección y vigilancia epidemiológica, que es el modelo centinela, el cual permite obtener datos muy precisos sobre la velocidad de propagación del virus, pero también del proceso de inmunización poblacional que se genere, afirmó Abelardo Ávila, epidemiólogo y especialista del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.

En entrevista con La Jornada destacó que a diferencia de la epidemia de influenza de 2009, en la que se cometieron muchos errores, pues se cerró la información y se adelantaron medidas extremas, ahora enfrentamos esta pandemia mejor preparados, con decisiones oportunas y sustentadas en conocimientos científicos y técnicos.

Señaló que en 2009 hubo un control político de la epidemia, lo que propicio rumores, falsa información de que existían miles de muertos. Tampoco se quiso activar el Sistema Nacional de Investigación Científica para la secuenciación del virus, por lo que toda información al respecto fue reservada y bajo control del Estado, lo que costó mucho en términos epidemiológicos pues no sabíamos a qué nos enfrentábamos. En esos años no hubo una detección temprana y tampoco se contaba con una adecuada vigilancia epidemiológica.

En contraste, dijo, hoy no se incurrió en esas fallas, se secuenció en pocos días el virus, con la colaboración de diversas instituciones científicas, y se liberó la información.

Por lo que respecta a la aplicación de pruebas, explicó que si queremos enfrentar la epidemia de manera eficiente, no tiene mucho sentido identificar a 85 por ciento de la población, que de infectarse, tendrá poco más que una gripe, porque tendríamos un enorme gasto de recursos, pues la prueba de detección del Covid-19 se desarrolló de forma específica, se estandarizó y certificó para evitar que se estuvieran haciendo pruebas de baja calidad. No es una prueba que uno va y compra en la farmacia.

Calificó de hazaña que el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica desarrollara en tan poco tiempo una prueba de tan elevada calidad técnica y control de calidad, pero también que se distribuyera en muy corto tiempo a los 32 laboratorios públicos estatales.

Ante las críticas por la falta de aplicación de evaluaciones rápidas de detección, insistió en que la detección del virus no influye en el tratamiento. Lo que se tiene que hacer es la protección de la población en riesgo, como son las personas adultas mayores y aquellas con enfermedades no transmisibles que elevan los riesgos de una mala evolución.

Tras lanzar un llamado a la población a mantener la calma y ejercer una confianza razonada en las acciones implementadas por el gobierno, destacó que la estrategia por la que se optó es la mejor, dado el conjunto de las condiciones de nuestro sistema de salud. Debemos tener un voto de confianza, porque lo que se está haciendo se hace con calidad.