El presidente Andrés Manuel López Obrador anunciará un plan de reactivación económica con el propósito de hacer frente al impacto del Covid-19, que incluye congelar salarios de la alta burocracia –incluido el suyo–, intensificar el trabajo de modernización de las seis refinerías para almacenar petróleo crudo y venderlo cuando mejoren los precios.

En conferencia de prensa, rechazó que por el arribo del coronavirus haya fuga de capitales y, acerca del alcance de la declaratoria de emergencia, apeló al compromiso social de los empresarios con el fin de que, de acuerdo con la Ley Federal del Trabajo, paguen sueldos completos y no solamente salarios mínimos –aunque también lo establezca la norma– y desistan de litigar. Informó que ha dado instrucciones de que no se detenga la devolución del impuesto al valor agregado (IVA) a las empresas.

Tras informar que el domingo –como parte de su primer informe de gobierno del año– presentará el programa de impulso a la economía, explicó que procurará una distribución equitativa del ingreso y no rescatará, como se hacía antes, a los de arriba, sino al pueblo. La riqueza no es contagiosa, dijo.

López Obrador reconoció que no conviene vender el petróleo a un precio por debajo de 11 dólares por barril, pero admitió que México debe seguir exportando –un millón 200 mil barriles diarios en la actualidad–, porque se tiene muy poca capacidad de almacenamiento por falta de refinerías.

Podríamos almacenar (crudo) para vender cuando mejoren los precios, añadió. La meta es reducir a final de año la exportación de barriles a 800 mil y aumentar la capacidad de refinación de las seis refinerías en 400 mil barriles diarios.

En este contexto, lamentó que los líderes de las grandes potencias no hicieran caso al llamado a una tregua económica que hizo en la cumbre virtual del Grupo de los 20, en medio de la crisis producida por el Covid-19, pues lo que hicieron fue desatar aún más la crisis en los precios del crudo, lo cual profundiza los daños en la economía mundial.

El lunes, recordó, un país productor declaró que iba a aumentar el volumen de sus exportaciones y eso tumbó el precio del petróleo crudo. Pero con todo, en México tenemos un plan y tomamos la decisión de mantener bajos los precios de la gasolina.

Al preguntarle si pediría a los funcionarios del gobierno unirse a la pobreza franciscana y reducir sus salarios, López Obrador mencionó que se congelarán los sueldos de los altos servidores de manera proporcional: va a ganar menos el Presidente y así, hacia abajo. Precisó que esta medida no aplica para los trabajadores con ingresos menores a 30 mil o 20 mil pesos.

Aprovechó para solicitar a los partidos políticos que en forma voluntaria entreguen la mitad de sus prerrogativas con el fin de darle más al pueblo.

Ante la caída de la economía mundial, el jefe del Ejecutivo federal resaltó la firma del Tratado México-Estados Unidos-Canadá, porque nos coloca en una situación especial en relación con otros países. México se convierte en un país atractivo para invertir, porque se tiene la posibilidad de vender al mercado más fuerte del mundo. Reiteró que no conviene cerrar la frontera norte.

Acerca del retiro que hicieron inversionistas extranjeros de 321 mil millones de pesos que tenían en bonos gubernamentales tras el arribo del Covid-19, aseguró que él tiene “otro dato: estamos bien… no se han retirado empresas y hay más inversión”.

Agregó: Somos víctimas de una crisis mundial y saldremos adelante. Muy pronto nos vamos a abrazar, porque vamos a superar esta crisis del coronavirus, la económica y la de bienestar social.