Jueves 2 de abril de 2020, p. 13
Los procesos electorales de Hidalgo y Coahuila quedaron ayer suspendidos debido a la emergencia sanitaria en el país, por acuerdo del Consejo General (CG) del Instituto Nacional Electoral (INE), que decidió ejercer su facultad de atracción de comicios locales para postergar los de esos estados. La medida, calificada de inédita en el México contemporáneo, tiene como propósito proteger el derecho a la salud de los ciudadanos, aseveró Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE.
En sesión extraordinaria virtual del CG, Córdova explicó que en cuanto se restablezcan las condiciones sanitarias para reanudar los procesos dialogará con las instancias jurisdiccionales y estatales correspondientes para fijar la nueva fecha de la jornada electoral, de ser posible a finales de julio o principios de agosto. Estaba calendarizada originalmente para el 7 de junio.
La decisión recibió el apoyo de todos los partidos, incluido el Revolucionario Institucional (PRI), el cual sin embargo, en voz de su representante legislativo, Claudia Pastor, cuestionó que el INE modifique el calendario de la contienda, pues la decisión requiere de una reforma legal aprobada por los congresos estatales o de una sentencia del Poder Judicial. Además, mover los comicios es una gran tentación para perpetuarse en el poder o ejercerlo sin plazo determinado, subrayó.
El acuerdo para aplazar las elecciones fue aprobado por todos los consejeros, deja en firme todas las decisiones, actos y pasos tomados o realizados hasta ayer y quedan pendientes el registro de los candidatos, la campaña electoral y la fecha de la votación.
El consejero Ciro Murayama señaló que la facultad de atracción del INE está determinada por la Constitución y el tribunal electoral determinó en 2017 que ésta también vale para modificar los calendarios comiciales.
Estimó que en el futuro no se moverá una elección a menos que haya una situación muy grave, tras destacar que la postergación de los comicios es una determinación extraordinaria y única ante una crisis de salud también extraordinaria.
En Hidalgo se elegirán 84 ayuntamientos y están convocados a votar 2 millones 200 mil ciudadanos, mientras en Coahuila se renovará el Congreso, con 25 diputaciones. La lista nominal de esta entidad asciende a 2 millones 100 mil personas.
Explicó que no se puede fijar una fecha para reanudar los procesos porque ni los expertos saben cuándo remitirá la pandemia. Si ésta impide que haya alcaldes electos el 5 de septiembre en Hidalgo, día en que deben tomar posesión las nuevas autoridades, el Congreso estatal tendrá que nombrar concejos municipales.
Córdova explicó que la suspensión de todas las actividades no esenciales hasta el 30 de abril por la emergencia sanitaria provocó la imposibilidad material para continuar adecuadamente con la planeación de las elecciones. Pretender que se desarrollaran sin atender las disposiciones sanitarias sería condenarlas al fracaso y poner en riesgo la salud de los ciudadanos, puntualizó.
Asumió que la postergación de los comicios es una decisión gravísima, pero se toma con solidez jurídica y con base en dos fundamentos: la declaración de emergencia sanitaria y el consenso que se construyó con todos los actores políticos.