Viernes 3 de abril de 2020, p. 21
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) va en la dirección correcta, al reconocer, como lo hizo en un documento enviado al Congreso el miércoles, una caída del producto interno bruto (PIB) de hasta 3.9 por ciento este año y la reducción en los ingresos presupuestales que se esperaban hasta ahora, pero se queda muy corta
en sus estimaciones, afirmó José Luis Calva, integrante del Instituto de Investigaciones Económicas (Iiec) de la UNAM.
El experto planteó: Debemos pensar en un déficit primario (ingreso menos gasto antes del pago de deuda) de por lo menos 3 por ciento del PIB para salir de la emergencia y este es el mejor momento para abrir la discusión y concertación de una reforma fiscal
.
Hacienda espera para este año un déficit primario equivalente a 0.4 por ciento del PIB, unos 100 mil millones de pesos.
Recordó que históricamente en el mundo cuando se hacen las grandes reformas fiscales es en situaciones de emergencia.
En situaciones de emergencia es cuando la comunidad nacional tiene la mayor disposición de cooperar y colaborar para sacar adelante a su país.
Explicó que el consenso de los especialistas señala que estamos frente a una crisis más grave que la recesión de 2009, con una caída del PIB superior a 5 por ciento en 2020.
Entonces, el pronóstico de la SHCP es optimista y se queda corto
al calcular una caída de 3.9 por ciento en el PIB.
También se queda corta la estimación de la caída de los ingresos presupuestales y particularmente de los ingresos tributarios.
El investigador del Iiec, aseveró que se estima en los Precriterios 2021, como es conocido el documento que entregó la SHCP al Congreso, una caída de los ingresos tributarios de 155 mil millones de pesos, pero va a ser mayor a los 500 mil millones de pesos, advirtió.
Sobre la reducción del gasto público de 38 mil millones de pesos para este año no es nada bueno, opinó. Por el contrario, debería haber una expansión del gasto público superior a 2 puntos porcentuales del PIB, respecto a 2019. Este mayor gasto público hay que canalizarlo principalmente al sector salud. Estamos en una emergencia nacional de salud y por lo menos hay que expandir el gasto con respecto a 2019 en 0.5 por ciento del PIB
.
Cada punto del PIB son 250 mil millones de pesos.