Además de intensificar la sanitización en las cárceles y restringir las visitas familiares, el gobierno capitalino aplicará a los reclusos de nuevo ingreso la prueba del Covid-19, como parte de las acciones para prevenir contagios en los penales.

La medida comenzará mañana en las cárceles locales, donde arriban a diario entre 35 y 50 personas.

La secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, indicó que ayer empezó la limpieza y sanitización de todas las áreas de uso común, dormitorios, auditorios, zonas generales y oficinas en reclusorios y centros de atención especializada para adolescentes y el de sanciones administrativas El Torito.

Se cuenta con una zona de aislamiento especial para la cuarentena en cada reclusorio y que no se han utilizado hasta el momento, porque por ahora no hay ningún contagiado por Covid-19, refirió.

Aseguró que también se ha reducido en 35 por ciento el número de visitas familiares, pues se restringió el ingreso de adultos mayores, mujeres embarazadas y niños.

Debido a que las visitas en los centros penitenciarios son normalmente cuatro veces a la semana, se determinó que martes y sábado fuera para dormitorios nones y jueves y domingos para los pares, con lo que se prevé reducir a la mitad la cifra de personas que acuden a ver a sus familiares.

Por otra parte, se acordó con la Arquidiócesis Primada no realizar la representación del viacrucis que cada año escenifican las personas privadas de la libertad en los reclusorios Norte, Oriente, Sur y en la Penitenciaria de la Ciudad de México durante la Semana Santa.

Las autoridades analizaban la posibilidad de que las representaciones se realizaran sin la presencia de familiares ni reos invitados, así como de personal de la Iglesia católica, es decir, que se hicieran en privado y con un número menor de participantes, pero finalmente se decidió cancelarlas.