La Secretaría de Seguridad del Estado de México informó que cuatro reos y un custodio del penal estatal de Cuautitlán dieron positivo a pruebas de coronavirus, por lo que fueron aislados de manera inmediata, al igual que otros 19 internos sospechosos de padecer Covid-19.

La Subsecretaría del Sistema Penitenciario mexiquense explicó que el coronavirus llegó al reclusorio de Cuautitlán, luego de que el 31 de marzo un custodio tuvo a su cargo la vigilancia de un convicto mientras éste recibía tratamiento médico en el Hospital General José Vicente Villada –en el mismo municipio–, donde había casos sospechosos de Covid-19.

El 9 de abril el uniformado tuvo temperatura alta, así como dolores de cabeza y pecho, por lo que se le impidió su ingreso a la prisión. Apegados al protocolo de sanidad para los Ceresos mexiquenses durante esta contingencia, se determinó cerrar el presidio a visitas a partir de este fin de semana.

También se reforzaron las medidas de prevención en todos los centros de reclusión de la entidad, además de que el cerco sanitario se aplica de manera más estricta al personal de los penales, proveedores, familiares y representantes legales, y aumentarán los simulacros de traslado en ambulancias de prisioneros con síntomas graves.

Los cuatro presos que dieron positivo a coronavirus fueron enviados al Centro Penitenciario Neza-Norte, habilitado como hospital especializado para atender a convictos afectados por la pandemia.

De igual forma, se trabaja en coordinación con el Instituto de Salud del Estado de México para reforzar el cerco sanitario que se instaló en los centros preventivos, y además hoy empezará una campaña de identificación de grupos vulnerables, toma de presión arterial y glucosa entre los reos.

Mientras, el gobierno de Cuautitlán dio a conocer que personal de protección civil y bomberos realizaron limpieza al exterior de la penitenciaría, donde desinfectaron la zona donde usualmente se congregan los familiares de reos.

Detectan un enfermo en cárcel de Mérida

También se diagnosticó un enfermo de Covid-19 en el Cereso de Mérida, a quien se le aplicó el protocolo sanitario y de aislamiento, de acuerdo con el gobierno de Yucatán. Explicó que el afectado es un varón de 60 años oriundo de la entidad, que tiene síntomas leves que no requieren hospitalización, su salud es estable y se encuentra en un área totalmente aislada del resto de la población carcelaria.

Añadió que en el penal capitalino emeritense se habilitó un área de aislamiento para atender este tipo de casos, a fin de proteger al resto de los internos.