Domingo 19 de abril de 2020, p. 8
Nueva York. Semanas en cuarentena con niños pueden agotar toda una colección de películas.
Incluso con servicios de streaming como Netflix, Amazon y Disney Plus, muchos hogares ya han tenido sus sobredosis de Frozen (Frozen: una aventura congelada), Onward (¿Unidos?) y otros títulos, pero existe un mundo más amplio de cintas para los pequeños.
Asumiendo que ya han visto obras como El fantástico Sr. Zorro, El gigante de hierro y Los Muppets, aquí se ofrecen algunas opciones que quizás no hayan considerado, todas disponibles en servicios de streaming, para renta o gratuitas.
Fly Away (Home: volando a casa). La sinopsis de esta película de 1996 con Anna Paquin y Jeff Daniels sugiere una cinta familiar sensiblera, pero tiene tanta gracia que se eleva sobre lo ordinario. Además, los gansos son realmente maravillosos. Una chica de 13 años (Paquin) se muda a la casa de su padre (Daniels) en un área rural de Canadá tras la muerte de su madre. Adopta un nido de gansos abandonado, los cría y les enseña a volar al sur para el invierno. El director, Caroll Ballard, y el fotógrafo Caleb Deschanel, también crearon un filme de belleza pastoral y dulce camaradería entre niños y animales en El corcel negro, de 1979, que puede verse en Amazon Prime.
El castillo de Cagliostro. Para ver películas de Studio Ghibli en streaming habrá que esperar el lanzamiento de HBO Max en mayo. (Fuera de Estados Unidos, están disponibles en Netflix). Son tan maravillosas que pueden proceder y comprar copias de Mi vecino Totoro, El viaje de Chihiro y La princesa Mononoke. Pero por ahora, pueden ver el primer largometraje dirigido por Hayao Miyazaki, maestro de la animación y cofundador de Ghibli.
The Castle of Cagliostro no es considerado lo mejor de Miyazaki, pero el ímpetu y la imaginación del director ya se perciben en esta cinta, una aventura que sigue explotando al gallardo ladrón Arsène Lupin. Aquí, Lupin descubre que el botín de un casino robado es falso.
Ningún niño que crezca viendo al comediante Buster Keaton saldrá perjudicado, es un hecho. La mayoría de los pequeños reconocen y ríen a carcajadas con su ingenio. Las cintas de Keaton están ampliamente disponibles, pero muchos de sus cortos igualmente brillantes pueden verse gratis. Entre ellos Una semana, en el que intenta construir una casa; La cabra, donde es confundido con un asesino, y Policías, en el que enfurece a toda la fuerza policial de Los Ángeles.
Filmes de conciertos
Stop Making Sense. Las películas de conciertos son una fuente infrautilizada de entretenimiento para los pequeños. El glorioso documental de Jonathan Demme sobre Talking Heads, disponible para renta digital y stream gratuito en Vudu, puede ser un buen comienzo, y como David Byrne va armando lentamente su banda –primero está solo, con una guitarra acústica y una casetera en Psycho Killer– Stop Making Sense les da una buena lección paso a paso de cómo construir un espectáculo funk postmodernista. Además, da tips de cómo usar trajes grandes y bailar con lámparas de piso.
También se puede ver A Hard Day’s Night (¡Yeah, Yeah, Yeah, Paul, John, George y Ringo!) en Criterion y El último vals, en Amazon Prime.
Los tres caballeros. Existen tesoros olvidados de Disney, incluida esta joya sicodélica de 1944 disponible en Disney Plus. En su cumpleaños, el pato Donald recibe un paquete de sus amigos desde Centro y Sudamérica. Adentro hay carretes de películas con cuentos individuales y diarios de viaje en los que Donald también se sumerge. Es una hermosa celebración exótica de América Latina con algunos momentos fabulosos y surrealistas que combinan animación y realidad. La cinta fue producida en tiempos de guerra, como parte de la política buen vecino para unir al continente y mantener a raya cualquier apelación de los poderes del Eje. En resumidas cuentas, Los tres caballeros no es la típica película de Disney.
Apollo 11. Este exitoso documental de 2019, en Hulu, sigue la misión a la Luna desde su lanzamiento hasta su rescate, sin entrevistas pero con gran cantidad de imágenes nunca antes vistas en IMAX. Es una cápsula de tiempo propulsora que 50 años sólo han hecho más estupenda.