Campesinos de los ejidos Constitución, Benito Juárez y Ricardo Flores Magón, en el municipio de Buenaventura, Chihuahua, se mantienen en plantón desde el domingo en el rancho La Mojina –en la misma demarcación– para denunciar que la familia LeBarón intentó ese día electrificar 12 pozos que la Comisión Nacional del Agua considera ilegales y que actualmente están en litigio en un juzgado federal.

Los inconformes afirman que los LeBarón están armados y los apoyan 40 elementos de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano apostados en La Mojina. La organización campesina El Barzón apuntó que Diego LeBarón, integrante de la familia de empresarios agrícolas, disparó a los ejidatarios con una escopeta y lesionó a dos jóvenes.

Agregó: La confrontación con integrantes de la comunidad LeBarón ocurrió porque ellos entraron sin autorización a terrenos de los ejidatarios el 19 de abril alrededor de las 21 horas para conectarse a la corriente eléctrica.

La mañana del lunes hubo otro enfrentamiento, informó Joaquín Solorio, líder de El Barzón en Buenaventura. Indicó que los pozos en La Mojina, propiedad de los LeBarón, reducen el nivel del agua subterránea y los ejidatarios no tienen dinero para hacer perforaciones más profundas.

El Barzón manifestó en un boletín que hace tres años integrantes de ejido Constitución denunciaron la extracción ilegal del agua que hasta la fecha realiza la familia LeBarón en la zona, pero no existe ninguna investigación ni se han interpuesto sanciones.

Añadió que los LeBarón también han abierto tierras al cultivo, violentando las leyes ambientales, ya que no cuentan con permisos de cambio de uso de suelo, y a la fecha se tienen contabilizadas más de 350 hectáreas con plantaciones de nogal.

Solorio explicó que los barzonistas tumbaron los postes de electricidad que había en el ejido Constitución desde fuera del predio de los LeBarón, por lo que es falso que invadieran propiedad privada.

A su vez, Diego LeBarón afirmó en Facebook que los barzonistas iniciaron las agresiones e irrumpieron en sus campos. Detonaron armas de fuego y actúan impunemente porque tienen protección de la autoridad estatal y de la Fiscalía General del Estado.

Expuso: Tememos por nuestra vida. Estas personas nos amenazaron de muerte y anoche entraron a nuestro rancho haciendo destrozos, venían armados. Si mueren más integrantes de mi familia será culpa del gobernador de Chihuahua (el panista Javier Corral), del fiscal (César Peniche) y del secretario de Seguridad Pública (Emilio García).

Incluso pidió ayuda a la Oficina Federal de Investigación estadunidense (FBI, por sus siglas en inglés), y recordó lo ocurrido en noviembre de 2019, cuando varios integrantes de esta familia, incluyendo niños (tres adultos y seis menores), fueron brutalmente privados de la vida.