Tras señalar que respeta la autonomía en las decisiones del Banco de México (BdeM), entre ellas la inyección de 750 mil millones de pesos para dar liquidez al sistema financiero, el presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió la necesidad de hacer un uso cuidadoso y moderado de las reservas internacionales. No son del Banco de México, son las reservas de la nación. Cuidar ese tesoro, para decirlo con claridad, y no disponer de esos recursos sin necesidad, tiene que justificarse muy bien.

López Obrador subrayó que el gobierno federal no ha acudido ni al financiamiento externo, ni estamos pidiendo recursos al Banco de México, porque pensamos salir adelante sin endeudar al país y sin perder reservas. Consideró que ya es tiempo de cambiar el modelo porque la crisis económica mundial que se enfrenta es una crisis del modelo neoliberal, por lo que no se puede incurrir en el mismo error fracasado, especulativo. Por otro lado reconoció la importancia de bajar la tasa de interés porque eso permitirá abaratar los créditos.

Recordó una anécdota de un diferendo que tuvo con quien fue su primer secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, cuando se debía presentar al Congreso el Plan Nacional de Desarrollo: me llevó el proyecto que se iba a enviar a la Cámara de Diputados y lo leí y era el mismo de siempre, el mismo esquema, como si lo hubiese hecho Aspe o Carstens o Gil Díaz, o cualquier secretario de Hacienda del periodo neoliberal. Tras desecharlo trabajó en paralelo con un equipo para elaborar el proyecto que finalmente se remitió al Congreso, pero que era una visión distinta.

Destacó que a pocos días de que venza el plazo para la presentación de declaraciones fiscales, se incrementó en 29 por ciento la cifra de contribuyentes que lo han hecho, lo que permitiría, dijo, que la captación de recursos fuera ligeramente mayor que el año pasado o, en su caso, tener solo una ligera caída a pesar de la crisis económica. Los mal portados son muy pocos, pero ya van a ir entendiendo que ya cambiaron las cosas.

Sobre las gestiones que hace el Servicio de Administración Tributaria para que las 15 grandes empresas que adeudan al fisco 50 mil millones de pesos paguen –entre las que se encuentran cinco consorcios extranjeros– “uno se atrevió a decir: ‘denúncienos, vamos a estar en litigio hasta el año 3000’”.

Por otro lado, señaló que si bien el mercado petrolero está muy inestable, parte de la estrategia que se seguirá para enfrentar la caída del precio del crudo será buscar reducir la importación de gasolinas, lo que implica incrementar la capacidad de refinación en México. Indicó que el año pasado se invirtieron 12 mil millones de pesos para la rehabilitación de las seis refinerías que tiene el país y para este año se cuentan con 10 mil millones de pesos adicionales.

Reiteró que se reducirá la producción petrolera cerrando las válvulas, porque se cuenta con nuevas tecnologías que permiten hacerlo sin nuevas inversiones para la reactivación.