La literatura nos ayuda a evadirnos. Esta realidad es muy dura: guerras, segregación y asesinatos. Estamos normalizándolo. La escritura y el arte en general nos ayudan a abstraernos y a resensibilizarnos, explica Magdalena Pérez Selvas a propósito de su novela Mäywen.

La literatura es ficción por muy ubicada en el contexto en que esté y nos ayuda a evadirnos. Esa función puede ser catártica para el ser humano y necesarísima, porque si no, estamos nada más en la violencia y el odio, dice la escritora a La Jornada.

Pérez Selvas comenzó a escribir esta novela cuando tenía 17 años. Para ello, quería mostrarnos como seres humanos, que si todo es mental como la guerra, la violencia y los feminicidios, pues también se pueden crear mundos fantásticos, amores trascendentales que nos enseñen el otro lado del ser humano.

La narración tiene la estructura de un libro de caballerías con aventuras, magia, el camino del héroe y una historia de amor, pero con una mujer como personaje principal, destaca Pérez Selvas. “Es una novela contemporánea. No es cuadradita, como el género que va del siglo XII al XIV: tiene sus licencias, mis licencias. Está construida a partir de Platón: los anhelos más trascendentales del alma por regresar a su antigua forma, su forma divina.

Magdalena Pérez Selvas (Ciudad de México, 1986) menciona que en el centro de la narración hay una historia de amor que, como en la Edad Media, toma la filosofía platónica. León Hebreo, Marsilio Ficino, Santa Teresa y Dante Alighieri, autores que estaban hablando del amor, sacro o profano, en el lenguaje platónico tienen cabida.

▲ Magdalena Pérez Selvas considera que la escritura y el arte ayudan a abstraernos y resensibilizarnos.Foto Yazmín Ortega

Sin embargo, también echa mano de los filósofos griegos naturalistas, que hablaban de que cuando se creó el mundo era un caos y los dioses habían dejado a seres elementales de la naturaleza para dar orden al fuego, a la tierra, a los elementos.

En un cosmos en que conviven seres mágicos con los humanos, que son avariciosos, destructores de la naturaleza, alzan fronteras y murallas y desdeñan al que es diferente, nace Mäywen marcada por la profecía de que un hada que nazca sin luz alumbrará el camino cuando todo sea oscuridad. Con un camino impuesto, Mäywen se puede mover de noche, entre las sombras, porque no tiene luz. A lo largo de la novela, a diferencia de la de caballerías, que contaba aventuras y los personajes eran arquetípicos, aquí sí tiene un trabajo sicológico y la protagonista va a evolucionar en su propio camino interior, explica Pérez Selvas.

La narradora sostiene que si bien la novela de caballerías era un canon de lo que podía aspirar la humanidad, en Mäywen son personajes contemporáneos y van a cometer errores, que probablemente en aquel género no ocurrían. El hada y el caballero actuarán en contra de los valores más altos que podrían tener la dama o el caballero medievales.

La obra puede adquirirse contactando a la escritora en sus redes sociales, pues se trata de una edición de autor. En formato digital puede obtenerse en Amazon.