Miércoles 13 de mayo de 2020, p. 20
Las pequeñas y medianas empresas (pymes) son, por ahora, las más afectadas en empleo por la pandemia de Covid-19. Aunque no se prevé la quiebra de grandes consorcios comerciales, las de menor escala serán las que tengan peores consecuencias en el futuro, afirmó este martes el banco Ve por Más (Bx+). Así, la administración debería tomar medidas de apoyo fiscal a la brevedad para que las pymes puedan mantener a la mayoría de sus empleados y cuenten con efectivo suficiente para aminorar la crisis.
Juan Rich, director de análisis y estrategia bursátil, indicó que las medidas que han tomado las grandes empresas en el país han sido claves para evitar la pérdida de empleos, pero las firmas menores han tenido que recortar personal. El sector de restaurantes, puede ser de los más impactados, debido a que no sólo cuenta con una base grande de empleados, sino que tiende a tener salarios muy bajos... En las empresas de la bolsa no hemos visto recortes masivos; sin embargo, el recorte de plazas sí se ha dado en las pymes, que a final son las que soportan la mayor parte de empleos del país
, dijo en videoconferencia.
Alejandro Saldaña, economista jefe de Bx+, precisó que para mitigar los impactos a las empresas pequeñas y medianas, el gobierno podría optar por implementar una serie de medidas fiscales para dar créditos a estas firmas, con tasas cercanas a 2 por ciento y condicionados a mantener la plantilla laboral, tal como en Estados Unidos.
Hay muchas ideas para la reactivación económica; destacaba postergar el pago de impuestos a empresas que tienen problemas de flujo de efectivo, no de viabilidad. Una buena iniciativa es postergar estos pagos; si le das un poco de aire y respiro a las empresas en la parte fiscal no tendrían que recortar tanto sus nóminas y mantendrán sus empleos; podrían dar apoyos fiscales sujetos a mantener el nivel de empleo
, mencionó.
Saldaña señaló que, con los impactos por la pandemia, es poco probable
que la administración alcance un crecimiento de 4 por ciento hacia finales del sexenio, y en el corto plazo, las estimaciones no superan el 2 por ciento.