Los boxeadores, al igual que nosotros, vivimos del boleto que paga la gente, afirma
Jueves 21 de mayo de 2020, p. a12
El panorama es desolador para los pequeños empresarios del boxeo. Ante el previsible retorno a las actividades sin público en los foros para evitar nuevos brotes de contagio de coronavirus, las posibilidades de supervivencia del eslabón más vulnerable resultan inciertas.
Mauro Ayala, entrenador y promotor de pequeñas funciones, advierte que los planes de regresar con funciones a puerta cerrada y sin público son impensables para ellos. Aclara, antes que nada, que comprende la necesidad, pero la disyuntiva en que los coloca la emergencia sanitaria es grave.
Nosotros vivimos del boleto que paga la gente
, explica, pero de ahí se desprenden beneficios para mucha gente, hablamos que de ahí obtienen ganancias al menos 40 familias
.
Para los boxeadores que empiezan sus carreras o aquellos cuyo nombre no forma parte de las grandes carteleras, estas funciones son una salida laboral. En cada velada se programan alrededor de ocho peleas, 16 boxeadores que pueden ejercer su oficio de paga, además de jueces, réferis, incluido todo lo que se requiere para instalar un foro.
Son peleadores que no les interesan a las grandes compañías, porque apenas empiezan, y no sólo ellos encuentran trabajo en este tipo de funciones
, agrega Ayala; hay una gran actividad comercial que se organiza alrededor, los consumos de alimentos y bebidas en estas carteleras populares
.
Las condiciones que se anticipan para montar una función, además de no poder contar con público, exige también medidas de sanidad para poder desarrollarlas. Inversiones en las que no pueden participar este tipo de empresarios.
Si esa va a ser la condición, pues estamos muertos, condenados a desaparecer
, lamenta; la taquilla es fundamental y eso que nuestras funciones son para unas 300 o 400 personas, pero sin ese ingreso es imposible para nosotros
.
Además de la taquilla, han logrado promover sus funciones gracias a la tecnología digital; eso atrae algunos patrocinios, aunque aclara que todo es a escala de sus producciones. Pequeños comercios que aprovechan estos encuentros para hacer publicidad local.