Lunes 1º de junio de 2020, p. 13
Dado el compromiso de México para reducir emisiones de gases de efecto invernadero –que en 2030 deben bajar 22 por ciento–, integrantes del Consejo de Cambio Climático, que asesora a la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático (CICC), declararon como incomprensible que la Secretaría de Energía (Sener) orille al país al posible incumplimiento de la legislación nacional y los compromisos internacionales, al emitir pautas que afectan el desarrollo de energías renovables.
En un posicionamiento que presentaron al CICC, al que pertenece la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Sener y otras dependencias federales, recordaron que el país debe disminuir en una década la emisión de 211 millones de toneladas de bióxido de carbono equivalente. Recordaron que se hicieron reformas a la Ley General de Cambio Climático en las que se retomaron las metas y compromisos establecidos en el Acuerdo de París, ya ratificado por el Senado.
El documento, suscrito por José Sarukhán, Adrián Fernández y Gustavo Alanís, entre otros expertos, reconoce que las secretarías de Medio Ambiente y de Relaciones Exteriores han reiterado el compromiso de México de cumplir con sus pactos internacionales; sin embargo, ante el acuerdo del Centro Nacional de Control de Energía que impide la actividad de las plantas de energía renovable, plantearon trabajar con esas empresas para que adopten las medidas necesarias y contribuyan a la estabilidad de la red eléctrica.
El combustóleo que se propone como alternativa para las plantas térmicas de la Comisión Federal de Electricidad compromete el proceso de descarbonización que ofreció México en el Acuerdo de París
, advirtieron. Esto puede generar cerca de 200 mil toneladas de dióxido de azufre al año. Solicitaron a la CICC que cite a sesión extraordinaria con el Consejo de Cambio Climático para discutir las acciones emprendidas por la Sener, a la cual pidieron haga compatible sus disposiciones y políticas con las metas de energías limpias.
Ambientalistas como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Greenpeace e Iniciativa Climática también han considerado que la política de generación de energía eléctrica de la Sener acelera el cambio climático.