Lunes 8 de junio de 2020, p. 4
Alejandra Tigre Jiménez eligió un camino alejado de la disputa. Después del de dar positivo por dopaje en enero, la boxeadora abrió una investigación, pero el resultado se confirmó como adverso, por lo cual el Consejo Mundial de Boxeo la suspende por nueve meses y restituye el título supermedio a la estadunidense Franchon Crews.
El veredicto lo acepta la Tigre, aunque no asume culpabilidad, pero lo hace para no prolongar este caso en un pleito legal. Acata la sanción, pero con la desilusión de que no se aclararon todas las dudas que surgen de su proceso.
Respeto los protocolos del CMB y sus reglamentos
, aclara; pero mi situación por la que se me sanciona de dopaje estuvo plagada de anomalías en el proceso, las cuales no fueron explicadas
.
El principal argumento para rechazar su responsabilidad es que la prueba que salió positiva fue tomada el viernes 10 de enero durante la ceremonia de pesaje. Después de la pelea, un día después, entregó una nueva prueba, la cual fue negativa.
Acudimos con especialistas que aseguraron que no pueden desaparecer de un día a otro las trazas de esa sustancia que detectaron antes
, explica; además en la prueba A aparece un porcentaje de la sustancia y en la B es mucho menor. Se toman al mismo tiempo y aseguran que no puede variar tanto el porcentaje
.
La Tigre no tiene más remedio que esperar que termine su sanción para volver a disputar el campeonato que considera le pertenece.