Con un minuto de silencio por sus compañeros fallecidos víctimas de Covid-19, policías pensionados marcharon del Palacio de Bellas Artes al Zócalo capitalino para exigir justicia y la pronta liberación de los dos ex integrantes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSC) encarcelados por agredir a una adolescente y a quienes un juez de control vinculó a proceso.

El delito que se les fincó a ambos, que pertenecían al agrupamiento Fauno de la SSC, fue abuso de autoridad en pandilla, por lo que manifestantes gritaban ¡justicia!, pues dijeron que la encarcelación se trata de un hecho político.

La principal exigencia es la inmediata libertad de los compañeros que fueron encarcelados injustamente, dijo Alfredo Monterrubio, presidente de Vanguardia Mexicana de Trabajadores y ex Trabajadores de Seguridad Pública, de la que forman parte policías en activo y retirados, al reclamar que sospechosamente no hay un solo detenido por parte de los encapuchados que causaron destrozos y saqueos en la capital durante las protestas del viernes 5 y lunes 8 de junio.

En entrevista, comentó que se trata de un asunto político porque la joven ni siquiera identifica a los compañeros y de manera injusta iniciaron un juicio por algo que no cometieron.

Recordó que los agentes realizan acciones para contener movilizaciones de alto riesgo siempre guiados por las indicaciones de un mando, pero hasta el momento nada se ha dicho de los superiores. Es increíble que los acusen de pandillerismo, en todo caso que detengan a todos los policías de todas los agrupamientos que estuvieron ese día durante el despliegue policial.

Ese día jóvenes con el rostro cubierto causaron destrozos y saqueos en bancos y tiendas de conveniencia, en las instalaciones del Metrobús, así como en las inmediaciones de la embajada de Estados Unidos y posteriormente se dirigieron a la casa Jalisco, en Polanco, en donde se encontraron con los policías.

Otro tema de la protesta de los pensionados fue la apertura de las instalaciones de la Caja de Previsión de la Policía Preventiva capitalina, luego de que fue considerada como no esencial, pues las viudas de los uniformados fallecidos por Covid-19 no pueden empezar sus trámites.

Además, dijeron que aún no reciben el incremento prometido de 9 por ciento y pidieron la continuación de servicios que quedaron congelados para los pensionados por la emergencia sanitaria.

“Los policías en trámite de pensión y jubilación también necesitamos atención y con miedo a ser juzgado por qué no estoy trabajando“, fueron algunas de las consignas que anotaron en cartulinas los uniformados, que llevaban caretas y cubrebocas.