Juchitán, Oax., Victoria Gómez, madre de Alexander, adolescente de 16 años de edad asesinado la noche del martes en Vicente Camalote, municipio de Acatlán de Pérez Figueroa, Oaxaca, solicitó a la embajada de Estados Unidos atraer el caso y pedir la extradición de los policías que asesinaron a su hijo, en el entendido de que su hijo tenía la doble nacionalidad.

Asimismo, exigió la renuncia inmediata del presidente municipal, el panista Adán Maciel Sosa, porque hasta ahora no hay justicia.

Agradeció las muestras de apoyo que recibió de todo su pueblo y pidió a los diputados locales que condenen esta agresión y apliquen juicio político al munícipe.

Victoria Gómez pidió seguridad para ella y su familia y responsabilizó al edil de lo que le ocurra. En nuestro pueblo y en todo el municipio de Acatlán Figueroa priva la inseguridad, la violencia, vivimos en una zona muy peligrosa, exigimos que los policías se vayan, ya no los queremos.

Alex, de 19 años, y hermano mayor de Alexander pidió al gobierno del estado solicitar el retiro de los policías municipales de Vicente Camalote y que otras corporaciones den seguridad a los habitantes, porque con la muerte de Alexander se comprobó que la corrupción y el abuso de poder es lo que priva.

Dijo que lo que viven es mucho dolor, pero que no bajarán la guardia para pedir justicia y castigo a los que mataron a su hermano, por eso recalcó que han solicitado la ayuda de la embajada de Estados Unidos para que juzgue a los policías municipales desde ese país y no en México.

Informó que el policía asesino anda libre y que el alcalde entregó a otro elemento, por lo que exigió a la Fiscalía de Justicia del Estado investigar a fondo y dar con los responsables..

Queremos castigo para todos los policías que iban en la patrulla 023, desde donde asesinaron a mi hermano. Vamos a ir a las últimas consecuencias, hasta que se dé con todos los responsables.

Alexander llegó a la comunidad de Vicente Camalote hace dos meses; estudiaba el segundo semestre de la preparatoria del Golfo de México en Orizaba, Veracruz, donde ingresó como becario; por su desempeño en el futbol jugaba en la tercera división y su sueño era estar en la Selección Nacional.

“Estoy fuerte y voy a luchar por mi hijo hasta que la justicia llegue, porque Alexander no era un delincuente, (pero) los policías le quitaron la vida.

La madre de Alexander expresó que no callará ni descansará hasta ver castigados a los policías municipales que lo mataron acusándolo de que portaba un arma, todo un montaje.

Imagínate, mi hijo fue por unos refrescos acompañado de nueve amigos y a los pocos minutos me avisan que lo mataron, él no fumaba ni tomaba, sólo quería era divertirse y ahora está sin vida.