Miércoles 17 de junio de 2020, p. 2
La proporción de fallecimientos de adultos mayores por Covid-19 es mayor en hospitales públicos que en los privados, debido a que a los primeros llegan personas con alto rezago social y en condiciones de salud críticas, advirtió el doctor Luis Miguel Gutiérrez, director general del Instituto Nacional de Geriatría.
La letalidad varía en función de diferentes condiciones; primero, el índice de rezago social es un factor que la incrementa. Vemos que la desventaja social juega un papel cuando vemos si entra en un hospital privado para atenderse por Covid, miren cómo disminuye el riesgo de mortalidad. Es brutal el impacto que tiene
, expuso durante un foro organizado por el Consejo Nacional de Población (Conapo) y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.
Al comenzar el foro Conversatorio. Violencia hasta las personas mayores, la secretaria ejecutiva del Conapo, Gabriela Rodríguez, presentó un panorama de los altos porcentajes de personas enfermas o discapacitadas entre los adultos mayores, al grado de que la mayoría declara tener dificultades hasta para subir o bajar una escalera.
Ante el Covid, advirtió, debemos dar una gran visibilidad de esta población (14.5 millones mayores de 60 años)
, en riesgo no sólo por la edad, sino por la alta incidencia de otras enfermedades, especialmente la hipertensión, que es el principal factor de comorbilidad en este sector de la población.
Expuso que la tasa de mortalidad es más alta para los hombres por Covid, pero hay más mujeres enfermas.
Por ejemplo, padecen diabetes 22 por ciento de los hombres y 27 por ciento de las mujeres; la diferencia es más acentuada en hipertensión: 35 los hombres y casi 50 por ciento las mujeres.
El doctor Gutiérrez destacó la tremenda
diferencia de muertes entre pacientes de Covid que ingresaron a un hospital público frente al privado. Luego, en la ronda de preguntas, explicó que ese factor se explica según el tiempo de espera para llevar al adulto mayor a un hospital o el lapso para acceder al servicio médico.
Advirtió que la pandemia por coronavirus acentúa las adversidades de la población mayor de 60 años: pobreza, aislamiento, discriminación y estigmatización, y habló de la necesidad de revisar el sistema de salud con el fin de enfocarlo no sólo a la reparación, sino a la prevención para una longevidad saludable, principalmente ante las enfermedades crónicas. Aquí tenemos otra curva qué aplanar
.
Ante la pandemia, explicó que el factor de la edad avanzada no es tan predominante como el número de comorbilidades, tipo obesidad o la propia pobreza, desventaja social que puede significar o no un desenlace fatal.