Domingo 21 de junio de 2020, p. 24
Atenas. Cientos de personas se congregaron en el centro de Atenas el sábado para celebrar el Día Mundial de los Refugiados, en medio de las críticas contra las políticas del gobierno griego sobre migrantes.
Unos mil 100 manifestantes, de acuerdo con la policía griega (unos 2 mil, según un fotógrafo de la Afp), marcharon en el centro de la capital griega, bajo un sol abrasador, con pancartas en las que se podía leer No a refugiados sin hogar, perseguidos, encarcelados
y cantando lemas contra los desalojos de refugiados de las residencias temporales.
La mayoría de los participantes eran miembros griegos de grupos antirracistas, pero también había algunos refugiados de los campos de migrantes próximos a Atenas.
Miles de personas se encuentran sin hogar en Grecia por el plan de reubicación de refugiados, ya que las autoridades griegas planean trasladar a 11 mil 200 personas para dejar espacio a otros solicitantes de asilo que actualmente viven en pésimas condiciones en campamentos de las islas.
Los refugiados podían permanecer en sus alojamientos hasta seis meses después de recibir el estatus de protección.
El nuevo gobierno conservador del primer ministro Kyriakos Mitsotakis redujo este periodo a solo un mes. El gobierno griego insiste en que está haciendo lo necesario para asegurar una tranquila transición para aquellos que abandonan su alojamiento
.
El Ministerio de Migración anunció que prolongaba el confinamiento de los campos de acogida para combatir el coronavirus.
Ese confinamiento está en vigor desde el 23 de marzo.
La Agencia de la Organización de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), en cambio, expresó su preocupación insistiendo en que los refugiados reconocidos, que se espera que abandonen la asistencia, no tienen acceso efectivo a beneficios sociales y apoyo.
Las autoridades han dicho reiteradamente que Grecia debe convertirse en un destino menos atractivo para los solicitantes de asilo.
La presencia continuada de más de 32 mil solicitantes de asilo en las islas –casi cinco veces superior a su capacidad de acogida– causó disputas con las comunidades locales que piden su expulsión inmediata.
Según Acnur, 3 mil solicitantes de asilo llegaron a Grecia por tierra y mar desde principios de marzo, aunque esta cifra es mucho menor que en meses anteriores.