Al considerar que el reportaje que se desprende de la declaración patrimonial de la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, se incurre en la calumnia, divulga datos falsos y confidenciales, invade nuestra privacidad y pone en riesgo la integridad física de toda nuestra familia, el investigador universitario y esposo de la funcionaria, John Ackerman, anunció que demandará al periodista Carlos Loret de Mola, quien difundió esa publicación a través del sitio Latinus.

En un documento en el que cuestiona las imputaciones que se desprenden del reportaje, el colaborador de La Jornada consideró que Loret de Mola vende sus malos oficios para atacar a las figuras más importantes de la Cuarta Transformación. Calificó al conductor de mitómano profesional que tuvo acceso de manera ilegal a la versión privada de la declaración patrimonial y divulgó datos sensibles e información confidencial.

“Aquí nadie le descubrió nada a nadie. La declaración de la secretaria de la Función Pública se encuentra en regla y reporta todos y cada uno de nuestros bienes con absoluta precisión. La nota de Loret presenta estos datos de manera engañosa (transformando mágicamente departamentos y un terreno en casas, por ejemplo), recurre a imágenes que no corresponden en absoluto con la realidad y ofrece interpretaciones fantasiosas sobre el origen de los bienes, pero no aporta ningún dato adicional más allá de lo ya declarado por la secretaria”.

Ackerman rechazó que las propiedades incluidas en la declaración se ubiquen en “zonas exclusivas de la Ciudad de México, refiriendo que incluso la propiedad heredada a Irma Eréndira por su padre se encuentra en una colonia popular, Santo Domingo, emblemática por su larga historia de luchas populares por la vivienda. Negó que fuera regalada por el entonces jefe de gobierno capitalino Marcelo Ebrard o cualquier otro funcionario, explicando que se escrituró a nombre de su esposa por ser la herma-na mayor.

Asimismo, el académico calificó de falsedad la aseveración de que las percepciones de cada uno de ellos fueran de 28 mil pesos y que no tuviéramos otros ingresos. Mencionó que los fondos para adquirir las propiedades mencionadas en la declaración patrimonial provinieron de los ahorros que pudimos acumular durante décadas de trabajo, un generoso premio que Irma Eréndira recibió en 2009 por haber ganado el primer lugar en el prestigioso concurso de la Fundación Espinosa Yglesias.