Tras los hechos violentos del pasado viernes en el municipio de Caborca, Sonora, el gabinete de Seguridad y la gobernadora, Claudia Pavlovich, acordaron incrementar el estado de fuerza en la región, donde organizaciones criminales se disputan el control territorial de una parte estratégica para el trasiego de drogas y de personas, explicó el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo.

En la conferencia de prensa matutina que encabeza el Ejecutivo federal en Palacio Nacional, Durazo detalló que el incremento de las fuerzas federales se hará con apoyo y compromiso extraordinario de las secretarías de la Defensa y Marina, y de la Guardia Nacional. Se consolidarán, agregó, indagatorias de mayor escala con la participación del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y de la Dirección Científica de la Guardia Nacional. Para ello, el general Audomaro Martínez (titular del CNI), estará de inmediato en Sonora en una reunión con la mandataria y su equipo de trabajo.

Afianzarán puestas a disposición

Durazo señaló ayer que en la reunión que sostuvieron –el martes– se determinó, además, fortalecer los procesos judiciales de los detenidos por los hechos de Caborca –con saldo de al menos 12 muertos, así como incendios en casas, automóviles y gasolineras–, con el propósito de que no salgan (de la cárcel).

Asimismo, se completará el plan emergente de seguridad en el estado con el traslado de algunos reos generadores de violencia en penales de la entidad, con la mejora en la coordinación entre la Federación, estados y municipios, y se consolidará el respeto al espacio de la seguridad pública como un ámbito de neutralidad política.