Durango, Dgo., Habitantes del poblado San José de Nazareno, municipio de Cuencamé, cerraron la mina de oro Hecla porque desde hace 20 años, cuando se le permitió instalarse, no ha cumplido con sus compromisos de emplear a pobladores locales y beneficiar a la comunidad.

Ángel Nava Castro, jefe de cuartel de Nazareno, señaló que representantes del gobierno estatal y de la empresa estadunidense se han negado a dialogar. Entre esos acuerdos destaca dar trabajo a los habitantes del lugar, becas a estudiantes, apoyo para fiestas patronales y para la escuela, construcción de un salón de eventos para la comunidad y un parque con juegos.

Nava Castro dijo que acudieron en varias ocasiones a la Secretaría de Desarrollo Económico del Estado para que se citara a los directivos de la minera, pero quien los ha atendido parece estar coludido con la minera y nos ha dado largas durante meses.

Hace dos semanas fueron a la empresa para buscar una reunión, pero uno de los directivos sólo les dijo: Háganle como quieran, por lo cual la población decidió cerrar la mina la tarde del miércoles.

Nava Castro aseguró que no permitirán la reapertura del yacimiento hasta dialogar con los directivos, autoridades estatales y representantes de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios.

A estos organismos se les ha solicitado realizar una inspección sanitaria y ambiental, pues la población teme que se esté contaminando el suelo. La mina se encuentra a 900 metros de la comunidad.

San José de Nazareno se ubica al sur de Cuencamé, a poco más de dos horas de la capital de Durango. Sus habitantes viven de la siembra del frijol y de la ganadería social.

El poblado tiene alrededor se 100 habitantes y el analfabetismo es de casi el 10 por ciento, mientras la escolaridad promedio es de apenas sexto grado de primaria, pues los hombres dejan la escuela para trabajar en el campo