Lunes 6 de julio de 2020, p. 20
De enero a mayo se recaudaron 19 mil 31 millones de pesos por bebidas azucaradas y alimentos altos en calorías conocidos como comida chatarra. Es el menor monto ingresado al erario por esos impuestos desde 2017, revelan datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La cifra por gravar dichos productos, cuyo consumo está asociado con enfermedades que agudizan los efectos del Covid-19, representa menos de 10 por ciento de los 210 mil 630 millones de pesos que el gobierno federal erogó en salud los primeros cinco meses del año.
Sin embargo, por separado, la recaudación por comida chatarra cayó 16.6 por ciento respecto del año pasado. En total, el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) por esos artículos fue de 7 mil 834 millones de pesos, frente a los 9 mil 116 millones que por el mismo concepto ingresaron el año anterior.
Mientras, por bebidas saborizadas, en las que se incluye el refresco, ingresaron 11 mil 196 millones de pesos, 2.2 por ciento más que los 10 mil 638 millones de enero-mayo de 2019. A este incremento le acompaña una actualización de la cuota a esos productos, la cual pasó a 1.26 pesos por litro este año.
Eso, en cuanto a alimentos y bebidas, también como parte de la Miscelánea Fiscal 2020, se actualizó a 49 centavos la cuota por tabacos labrados, una vez condensada la inflación de 2011 a 2019. De enero a mayo pasados la recaudación por ese concepto se ha incrementado 20.5 por ciento. Los 21 mil 626 millones de pesos ingresados por ese rubro son el monto más alto desde que se grava con IEPS ese producto.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), los mexicanos son más vulnerables a las complicaciones de Covid-19 por sobrepeso, obesidad y diabetes. En promedio, 42 por ciento de pacientes que han fallecido en el país padecían hipertensión, 37 por ciento diabetes y 25 por ciento obesidad, reportó la semana pasado El Poder del Consumidor.
Las bebidas azucaradas son consumidas prácticamente por toda la población, pero ocupan una gran parte del ingreso de los más pobres. De acuerdo con un reporte de Hacienda para medir el impacto de la recaudación en la distribución del ingreso, el IEPS a bebidas saborizadas, entre ellas refresco, es el gravamen con que más se capta de los hogares de menores ingresos en el país.
Entre el decil primero y segundo aportan 9.5 por ciento de la recaudación de esos productos frente al 10.9 que ingresa por el decil 10, el de mayores ingresos. En contexto, por gasolina 20 por ciento de hogares de menos ingresos contribuyen con 4 por ciento y por cerveza con 2.5; mientras, sólo 10 por ciento de los más ricos por los mismos rubros aportan 30.1 y 30.3 por ciento, respectivamente.