Río de Janeiro., El juez del Tribunal Supremo Federal (TSF) Alexandre de Moraes aceptó ayer una petición del Partido Comunista de Brasil y notificó a la Procuraduría General de la República para que evalúe si hay que investigar al presidente Jair Bolsonaro y a sus hijos por calumnias, difamaciones y amenazas contra la máxima institución judicial del país

En su decisión, publicada ayer, el juez no valora los hechos y se limita a decir: Que se abra vista a la Procuraduría General de la República para manifestación, y a partir de ahora el fiscal general, Augusto Aras, deberá decidir.

La petición, presentada por la diputada comunista Perpetua Almeida, afirma que hay fuertes indicios de que la familia Bolsonaro y sus aliados cometieron delitos de calumnia, difamación, injuria y amenaza contra el Tribunal Supremo Federal y sus jueces, además de agresiones contra el Poder Legislativo.

La iniciativa de la diputada ocurre días después de que fueron eliminadas 35 cuentas, 14 páginas y un grupo de Facebook, además de 38 cuentas de Instagram que, según Facebook, responsable de las dos redes sociales, representarían a perfiles con comportamiento falso.

La red social encontró conexiones con trabajadores de gabinetes con los hijos del presidente, así como de diputados del ultraderechista Partido Social Liberal, en el cual militó Bolsonaro, en Río de Janeiro.

Una de estas páginas Bolsonaro news, por ejemplo, estaba registrada con el correo electrónico de Tercio Tomaz, quien fue asesor del concejal de Río de Janeiro Carlos Bolsonaro y ahora es asesor especial del presidente.

La diputada que presentó la petición ante la justicia quiere que estos nuevos hechos se añadan a la investigación que ya está abierta en el Tribunal Supremo por difusión de fake news y amenazas contra el Poder Judicial que ya tiene a los Bolsonaro en el punto de mira.

El Partido Comunista de Brasil solicitó al máximo tribunal que las noticias criminales se anexen al caso de las falsas. Por el momento, el juez no ha examinado tal solicitud.

La semana pasada, el ministro autorizó a la Policía Federal a tener acceso a la investigación de Facebook, que eliminó las cuentas vinculadas al PSL y a la familia Bolsonaro.