Se retrocederá cuatro décadas
Haití, el Caribe, el corredor seco de CA y Venezuela, las zonas más afectadas: OMS
Viernes 24 de julio de 2020, p. 2
El Covid-19 tendrá graves impactos en la seguridad alimentaria de América Latina y el Caribe. Estimaciones de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) advierten que más de 80 millones de latinoamericanos y caribeños sufrirán hambre tras la pandemia, con lo que la región retrocedería 40 años en el combate a ese flagelo.
El subdirector general para América Latina y el Caribe de ese organismo, Julio Berdegué, indicó que antes de la crisis sanitaria mundial, en la región sumaban 48 millones de habitantes en condición de hambre, a los que podrían sumarse más de 28 millones debido a las consecuencias del Covid-19.
Se trata de seres humanos que no tienen posibilidad de consumir la energía mínima requerida para tener una vida activa. Hay que impedirlo. Las consecuencias humanas y sociales serían gravísimas y las derivaciones políticas serían profundas. No se puede construir la paz sobre estómagos vacíos
, sostuvo.
El foro virtual Covid-19 y sistemas alimentarios en América Latina y el Caribe. Acción multilateral para impedir que la crisis sanitaria se convierta en crisis alimentaria, organizado por la FAO y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), convocó a las naciones de la región a trabajar en un programa multilateral para evitar que la crisis sanitaria se vuelva alimentaria. Propuso una iniciativa que sea acompañada por los organismos regionales con cuatro objetivos: asegurar el comercio de alimentos; mantener activas a las millones de empresas alimentarias, comenzando por los 16 millones de agricultores familiares y 2 millones de pescadores artesanales; asegurar que los hogares en condición de pobreza extrema accedan a una alimentación suficiente, y formular políticas que permitan una reconstrucción.
La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, resaltó que las zonas más afectadas serán el Caribe, el corredor seco de Centroamérica, Haití y Venezuela.
Estamos ante una década perdida en todo lo social y lo económico. Habrá un cierre de 2.7 millones de empresas formales, las que más nos preocupan son las que producen alimentos
.
Enfatizó que ocho de cada 10 latinoamericanos viven por debajo de tres líneas de pobreza, es decir, con menos de 500 dólares al mes.
Planteó la necesidad de que los estados establezcan un ingreso básico de emergencia de 67 dólares mensuales a las familias más necesitadas, periodos de gracia y crédito
a las pequeñas y medianas empresas, en especial a las que producen alimento, entre otras.
El canciller Marcelo Ebrard, que a nombre de México ocupa la presidencia pro tempore de la Celac, llamó a trabajar de manera conjunta en la región y hacer escuchar la voz de América Latina en el mundo.